Lizzo es demandada por acoso sexual; "Las cosas se salieron de control"
Tres exbailarinas de la cantante impusieron la denuncia por acoso sexual, además de ser señala por crear un ambiente hostil de trabajo.
Después de ser un símbolo de empoderamiento y amor propio, Lizzo fue demandada por tres bailarinas que trabajaron con ella, quienes la acusan de acoso sexual y de crear un ambiente hostil de trabajo.
De acuerdo con documentos legales obtenidos por Page Six, la intérprete de 'Pink' presuntamente invitó a Arianna Davis y Crystal Williams a pasear por la ciudad de Ámsterdam cuando Lizzo comenzó a obligarlas a hacer cosas que no querían, como tocar a trabajadoras sexuales.
"De pronto las cosas se salieron de control. Lizzo comenzó a invitar a los miembros del equipo a tomar turnos y tocar a las artistas desnudas, cachar vibradores expulsados desde las vaginas de éstas y a comer plátanos que salían de sus vaginas", se lee en la demanda.
Después de este incidente, la cantante volvió a mentirles a las bailarinas y las llevó a otro club nocturno donde también habían mujeres desnudas.
Lizzo también está siendo acusada por Arianna Davis de hacerle comentarios sobre su presunto aumento de peso, lo que ha hecho que cientos de personas tachen a la cantante de hipócrita, pues desde el inicio de su carrera ha comentado que lo más importante es el amor propio y respetar cuerpos ajenos.
El medio Rolling Stone informó que la bailarina fue despedida por grabar uno de los ensayos de la cantante sin su consentimiento, aunque la demandante alega que lo grabó porque tenía un problema ocular que le impedía salir de su casa.
"Lizzo se puso furiosa, lanzó insultos al grupo y dijo que iba a recorrer la habitación, persona por persona hasta que alguien le dijera quién hizo la grabación", declararon en la demanda.
La capitana de baile Shirlene Quigley también fue acusada de acoso religioso y racial, pues en los ensayos compartían que las personas no podían tener relaciones sexuales antes del matrimonio.
La cantante también enfrenta otra demanda por obligar a las bailarinas a participar en una sesión de fotos desnudas durante el reality Lizzo, Watch Out for the Big Grrrls.