Martín Palermo gana la partida en su reencuentro con Chivas

Pachuca

PACHUCA, HGO.- No es suficiente ser una sucursal en cada estadio que visitan.

Al Guadalajara aún le falta contundencia para dar el salto de calidad, ése que el Pachuca le restregó hoy por la noche (3-1).

Casa llena la del estadio Hidalgo, pero de un atípico rojiblanco en las tribunas.

Invasión tapatía que le recordó al rival que su técnico no es grato.

Las rechiflas hicieron eco tras la salida de Martín Palermo, personaje que en la Copa Libertadores 2005 se convirtió en enemigo del futbol mexicano por sus agresiones contra el ídolo chiva Adolfo Bautista.

Una vez sonó el pitazo inicial de Fernando Hernández, ambos hicieron gala de intensidad y juego dinámico.

El marcador se abrió a los 14 minutos, por conducto de Ismael Sosa; sin embargo, gran parte del mérito se debió a Edwin Cardona, quien buscaba disparar a puerta tras una serie de regates.

Al no contar con espacio, asistió en corto al argentino Sosa, quien resolvió fácil, con un tiro cruzado.

Parecía que el ánimo rojiblanco quedaría expuesto.

Y no.

Las Chivas usaron la presión a su favor para contestarle al anfitrión y en sólo cuatro minutos lograron empatarlo 1-1.

Dentro del área Isaac Brizuela encontró fortuna con un balón que primero se paseó entre las piernas del meta Alfonso Blanco antes de saludar a las redes.

La intensidad no faltó en la segunda mitad.

Con un Cardona muy participativo en cada jugada, incluso, con labores defensivas para buscar algún contragolpe.

Los de Martín Palermo volvieron a echar el peso del partido contra la visita.

A los 48' cayó su segunda anotación de la noche (2-1), gracias a que Víctor Guzmán aprovechó un rebote del guardameta Raúl Gudiño.

Con este resultado, Chivas se tropieza con sus 14 unidades, mientras que los Tuzos los alcanzaron con los mismos puntos y pegados en los principales puestos de clasificación.

El Universal / GMA 23/02/19/EV