El Centauro del Norte

El autor es Escritor e Historiador.

(PRIMERA PARTE)

Durante la primera mitad del siglo XX nuestro México transitaba por diversos sucesos históricos que marcarían un antes y un después en su historia: basta por citar la huelga de Cananea, la Revolución Nacional, la primera y segunda guerra mundial, entre otros.

Pero bien, enfoquémonos en los años de 1910s una vez estallada la revolución maderista, ya que en esta surgen diversos nombres y apellidos de grandes militares cuya misión era la silla presidencial. Esto se demostró cuando tras el golpe de estado cometido contra Francisco I. Madero y José María Pino Suárez el día 22 de febrero de 1912 don Victoriano Huerta se convirtió en presidente de nuestra nación.

Y es así como hemos visto que grandes (algunos sólo por nombres y no por acciones) revolucionarios han llegado al poder; destaca Madero, Carranza, Álvaro Obregón, Carvajal, entre

otros. Pero… ¿Y Villa? Para muchos el “Centauro del Norte” más que un ídolo nacional se ha señalado que debe de ser visto como un general que llegó al poder en base al uso de la fuerza

bruta.

Abro paréntesis sólo para comentar un pequeño dato relacionado con el autor de esta columna: la esposa de Pancho Villa, doña Luz Corral Fierro, originaria del municipio de Riva Palacio,

Chihuahua, fue prima hermana del bisabuelo de un servidor.

Prosiguiendo con el tema, si algo nos queda claro y es digno de admirarse es que el único militar mexicano que ha logrado invadir territorio estadounidense fue este personaje, ya que durante la  madrugada del 9 de marzo de 1916 al grito de “¡Viva Villa!”, un pelotón conformado por más de 600 efectivos asaltó la comunidad de Columbus, Nuevo México.

Aunque ambos bandos (villistas y americanos) se adjuntan la victoria: uno por la toma de  este poblado y el otro por la defensa de su nación, pero lo que si nos queda claro es que la versión más razonable por la cual se produjo la batalla fue en represalia por el apoyo del entonces gobierno norteamericano al general Carranza.

Su ideología era muy sencilla: la palabra dada no debe de ser violada; hay que proteger a las viudas; a los huérfanos hay que darles educación y a los compadres nunca hay que traicionarlos.

Inició un modelo de socialismo en el cual se repartían las tierras de las haciendas y los precios de los artículos de primera necesidad se daban a la mitad. Para concluir con la primera parte, debemos de señalar que Villa tenía solamente 36 años cuando asumió la gubernatura de Chihuahua haciendo a mi parecer uno de los mejores trabajos en la historia de dicho Estado. El New York Times hace la siguiente declaración:

“Sentía una verdadera pasión por las escuelas y estableció cincuenta planteles de educación en la ciudad. Hizo que el Ejército hiciera  funcionar los tranvías, la planta de luz eléctrica, los

teléfonos y el agua potable.

Instaló molinos de harina y mataderos de ganado. Cerró las cantinas e hizo fusilar a uno de sus propios soldados cuando lo encontró en estado de ebriedad”. Como logramos apreciar en esta primera parte, Pancho Villa más que un revolucionario fue un hombre de misterios, con aciertos y errores fue un… ¿Traidor o Patriótico?

Fuente Bibliográfica: Archivos de la Secretaría de la Defensa Nacional.

El autor es Escritor e Historiador.

Estudiante de la Escuela de Derecho de la Universidad Unilíder.

Correo: Oscarfierro.

reyes135@gmail.com

Facebook: Oscar Alejandro

Fierro Reyes

Instagram: Oscarfierro_reyes135