Deja de regar flores muertas

La autora es locutora, entrepreneur y networker.

Cuántas veces nos ha pasado que nos aferramos a alguna persona, situación o actividad y creamos una dependencia sin poder ver realmente si eso nos suma, nos resta o hasta nos multiplica.

Me he percatado de que todas las personas o situaciones que pasan por nuestra vida tienen algún objetivo: enseñarnos, ayudarnos o simplemente cumplir una misión.

Debemos aceptar que todo tiene su fecha de inicio y de caducidad. Considero que deberíamos tomar lo que nos sirve y agradecer y soltar todo aquello que no nos suma.  Canalizar la tristeza por gratitud.

Por ejemplo: cuando tú tienes una flor, ésta necesita sol y agua para poder crecer, pero, ¿qué pasa si esa flor ya está muerta? Tú le das agua, sol y todos los nutrientes para que crezca, sin embargo,

por más que la riegues, esa flor ya murió y nunca va a florecer. Lo mismo pasa con este tipo de situaciones: algunas personas que entran en tu vida son como esas flores; por más que quieras ya no van a florecer.

Deja de culpabilizarte y pensar que tuviste la culpa. Hay veces que puedes sentir que no te puedes despedir. Puede ser que pienses que quizá estás equivocada y debes seguir. Nunca fuerces nada.

Lo que es para ti lo será aunque te quites y lo que no será ni aunque te pongas. Nada pasa por accidente. Cada experiencia sucede por alguna razón. Las relaciones que más debes valorar son las que llenan de paz tu vida, son las que sacan lo mejor de ti, las que te llenan de alegría y para poder atraerlas lo único que debes hacer es llenarte de amor a ti mismo.

En la medida en que te ames, las atraerás.

A veces es necesario perder para ganar. Cuando sientas que la vida te está quitando algo, significa que te está haciendo espacio para lo que viene. Perder es parte de crecer y madurar. Deja de enfocarte en lo que se fue y enfócate en lo que sí está.

No todo lo que dejas es una pérdida. La mayoría puede ser una completa bendición, así que no temas dejar ir todo aquello que no te suma ni te bendice. Da gracias a todas las personas que han pasado en tu camino, que a pesar de que sacaron lo peor o lo mejor de ti, estén o no estén aun contigo, te enseñaron algo que en su momento tenías qué aprender. Nada pasa por accidente; cada experiencia te lleva a donde debes estar y te prepara para lo que viene.

Hay que hacer espacio para las personas que  necesitas en el próximo capítulo de tu vida.

La autora es locutora, entrepreneur y networker.

IG: @lupitaperezoficial