La importancia de las empresas en México para el desarrollo del país

El autor es director de Grössman Beyond Marketing.

Hace días el titular del Ejecutivo Federal realizó algunos comentarios desatinados respecto a las empresas, minimizando el papel que juegan en la economía del país. Por eso decidí investigar y encontré datos, para que usted amable lector, tenga un juicio de valor.

Desde hace ya un tiempo, el tema del bajo crecimiento económico del país está en el ojo del huracán de políticos, analistas, empresarios y ciudadanía. El descontento y preocupación tiene que ver con el hecho de que México ha crecido a tasas bastante menores a las del resto de países comparables, menores a las de países de América Latina y, sobre todo, por debajo de su potencial. El impacto de tener cifras de crecimiento modestas es muy evidente en términos del bienestar general de la población, el crecimiento del ingreso per cápita, así como el crecimiento del empleo y los salarios. Todo esto crea la sensación de que no avanzamos y que el progreso está estancado.

En México existen 4.2 millones de unidades económicas, de las cuales más del 90 por ciento son Pymes y generan el 78 por ciento de los empleos del país. Sin embargo, son las grandes empresas quienes juegan el papel más importante en el desempeño económico con una aportación de 58 por ciento al PIB.

Las empresas mexicanas tienen el compromiso de fomentar el crecimiento del país a través de la economía, generación de empleos, capacitación del capital humano, desarrollo e innovación tecnológica y responsabilidad ambiental.

A pesar de ser una fuente muy importante en la economía del país, las Pymes no cuentan con muchos de los recursos necesarios para que se desarrollen de una manera plena y existen en el país grandes problemas que las afectan en gran medida.

Entre las problemáticas de las pequeñas y medianas empresas podemos resaltar que sus inversiones para tecnología, infraestructura, seguridad, entre otras, son de un 0.5% y 0.7%, respectivamente, estancando su propio crecimiento. Por lo anterior resulta lógico que aproximadamente 70% de las Pymes no cuenten con base tecnológica instalada teniendo temor de no poder solventar los costos de inversión y operación que esto implica; aunque también existen razones menos aceptables a esto como la resistencia al cambio, el desconocimiento de los sistemas de información, la falta de infraestructura y la carencia de visión sobre los beneficios que la tecnología puede traer a una empresa.

El negocio informal juega un papel muy importante ya que en los últimos años ha tenido una gran proliferación y no genera ingresos fiscales, se sustenta en el contrabando y prácticas ilegales como la producción y la venta de “productos piratas” que sólo generan competencia desleal contra las empresas legalmente establecidas, además de que la corrupción dentro del sector público no resulta benéfica para este suceso, considerando un reto más para las Pymes, dentro de los desafíos a los que se tienen que enfrentar.

Algunos datos que nos ubican dentro de este contexto son: las Pymes comprenden alrededor del 90% de las empresas constituidas en el país. La cifra es todavía mayor dentro del sector manufacturero, representando el 99% de los establecimientos manufactureros. Y de ese 99%, el 82.19% son pequeñas empresas que generan el 13.22% del personal ocupado. La pequeña empresa comprende el 13.69% de los establecimientos y origina el 20.80% del empleo. A la empresa mediana corresponde el 2.39% de los establecimientos creando el 15.39% del personal ocupado.

Hoy más que nunca el sector público y el sector privado requieren trabajar en forma alineada y estructurada para dar la vuelta a esta caída en la inversión en el país. Es necesario elevar la inversión como porcentaje del PIB y esto necesariamente requiere alinear los objetivos públicos y los privados de una forma en la que no se ha hecho antes y para la cual no hemos creado un mecanismo o foro de colaboración apropiado en el que se alineen intereses. Este mecanismo o foro no se puede copiar y tiene que ser una receta muy mexicana, hecha a la medida de nuestra cultura. ¿Cómo alinear el crecimiento de las Pymes poco capitalizadas con el de las grandes empresas privadas y modernas?

El autor es director de Grössman Beyond Marketing.

manolo@grossman.mx