Cataluña y sus vinos

El autor es Ingeniero Agrónomo por el ITESM–Obregón.

Temerariamente visitamos Cataluña a principios de marzo, cegados por la ilusión, osadía (y miopía) que me tiene en claustro voluntario por prudencia; ciertamente mi cerebro sigue con una embriaguez de imágenes y sensaciones agradables que no acabo de digerir. Concretamente llegamos a Barcelona, su capital, y visitamos las regiones vitivinícolas de El Penedés y el impresionante Priorato (mi objetivo principal).

Barcelona, artística y original Fue emocionante haber estado donde viven o vivieron Dalí y Miró, los arquitectos Gaudí y Domènech; los escritores Ildefonso Falcones (La Catedral del Mar), José María Gironella (Los Cipreses Creen en Dios), Javier Cercas (Soldados de Salamina) y Carlos Ruiz Zafón (La Sombra del Viento); José Carreras y Montserrat Caballé y muchos más; pero me falta espacio.

Barcelona es una ciudad de menos de 2 millones de habitantes, sin Uber ni Cabify. La gente habla catalán y español como alternativa.

Barcelona sorprende por todas las manifestaciones artísticas de arquitectura modernista, encabezadas por La Sagrada Familia, La Pedrera y El Parque Güel, de Gaudí o el Palau de la Música

Catalana de Domènech, o su enorme Catedral medieval, o la original Santa María de la Mar (alias “La Catedral del Mar”), monumentos que sorprenden al aparecer casuales al caminar por

la calle y que siguen siendo para lo que fueron concebidos.

El vino… que es mi tema Desde aquí agradezco a mi buen amigo Maxime Bazart y a su jefe Joan Cusiné -de la fabulosa bodega Pares Balta-, por su generosa hospitalidad.

Cataluña es la tercera Comunidad española en producción de vino; destacaré 3 de las 12 Denominaciones de origen catalán que hay: Cava, Penedés y Priorato, sin menoscabo de las demás.

El vino más producido en Cataluña es el Cava, el vino espumoso español que en su mayoría se produce en las inmediaciones de Villa Franca del Penedés, cerca de Barcelona; se elabora mayormente con las uvas blancas autóctonas Parellada, Xarel-Lo y Macabeu.

Ahora, bajo la D.O. Penedés, se producen vinos tranquilos con diferentes uvas como Cabernet Franc, Merlot y Garnacha; para lograr grandes vinos, como el Más Irene, el Marta de Balta o incluso el Honeymoon. Los lugares donde crecen sus uvas son tan variados que su visita es tan emocionante como la de Barcelona.

La D.O.Q. Priorat, situada en la sureña provincia de Tarragona, ocupa un paraje casi lunar, laderas muy inclinadas, coronado por la majestuosa sierra del Montsant. El suelo está compuesto de pizarra, localmente llamada licorella.

Por lo tanto, los viñedos están dispuestos en terrazas labradas en los cerros desde antaño y pobladas por plantas diminutas, con raíces profundísimas que han tenido que luchar por sobrevivir año tras año.

El clima es rotundo, con contrastes térmicos de más de 20ºC que se traduce al vino con un color oscuro y profundo. La ecuación de cepas viejas en suelo rocoso y clima rotundo da como resultado ¡vinos tremendamente buenos!

Pudimos probar todos los vinos de la bodega Gratavinum, aún sonrío con el recuerdo de: el 2Pi Erre, el GV5 (muy elegante) y, la novedad para mí: el Costers, vino máximo de la bodega: súper

elegante, complejísimo, equilibrado y todos los adjetivos positivos que se me ocurran, excepto “barato”, porque superará los 3 mil pesos.

Vale la pena darse un viaje virtual a través de los vinos de Cataluña… no aprenderemos su lenguaje, pero podremos comprenderlos un poco más.

El autor es Ingeniero Agrónomo por el ITESM–Obregón.

Miembro fundador de la Cofradía del Vino de Hermosillo.

Comerciante de vino en Sonora y México Comentarios: javier@lacubiella.com