ALGO ME LIMITA, PERO NO SÉ QUÉ

Escritor, Capacitador, Conferencista y Life Coach en SB3.

No puedes superar tu autoimagen. 

Tu autoimagen son las ideas que tienes sobre ti, conscientes e inconscientes. De hecho la mayoría de esas ideas fueron puestas en tu mente desde antes de que tuvieras capacidad para razonar.

A estas alturas ya tenemos nuestra autoimagen definida, y no podemos superarla. Estamos influenciados(as) por nuestra autoimagen, así que nuestros pensamientos conscientes tienden a ser pensamientos que están en armonía con esa autoimagen. Es por esto que, lo que para una persona es lógico, a otra puede parecerle una locura.

La autoimagen controla las acciones, y las acciones controlan los resultados. Y quizás algunas veces puedas variar tus resultados, pero nunca estarán muy por encima de tu autoimagen. La clave es reinventar la autoimagen.

¿Y cómo lo hago? Bien, la mente te da un potencial infinito para moldear tu autoimagen, a través del pensamiento creativo. Las imágenes que pones en la “pantalla” de tu mente, se imprimen en el subconsciente. Y podemos elegir las imágenes a proyectar en nuestra mente de diferentes maneras:

  • Con lo que está pasando en el presente;
  • Con la memoria para poner imágenes del pasado;
  • Usando la imaginación para colocar imágenes del futuro.

 

Podemos pensar cosas que nunca han sido pensadas, reuniendo así información para crear nuestras experiencias, mientras vamos reconfigurando nuestra autoimagen.

La mente no puede diferenciar lo que es real, de lo que no, así que literalmente podemos crear recuerdos por adelantado. Y quizás estés pensando que esto es mero autoengaño, ya que lo que imaginemos del futuro no estará soportado, y el efecto no será real. Así que te dejo un ejercicio:

Imagina lo más vívidamente posible que a lado tuyo hay un plato con un limón real, chilito en polvo, sal, y un cuchillo. Sigue imaginando vívidamente que agarras el cuchillo, partes el limón a la mitad, lo exprimes ligeramente para que se humedezca rico, te brota un poco de zumo, te llega el olor del limón, le echas chilito en polvo, sal y, ahora que se ve muy apetecible, te preparas para comerlo...

¿Me vas a decir que no salivaste ni un poquito?

Acabas de imaginar una experiencia que no es real, como lo que te sugerí, sin embargo el efecto (la salivación) sí fue real. Con eso se comprueba que a la mente no le importa si algo es real o no, con que lo crea real y/o lo pueda visualizar, generará efectos fisiológicos reales.

Utiliza esta facultad de tu mente para moldear tu autoimagen, elevar tu estándar, y verás cómo mejorarán considerablemente los resultados en las diferentes áreas importantes de tu vida.

 

Jimmy Santiago Beltrones Carbajal

Escritor, Capacitador, Conferencista y Life Coach en SB3.

beltr0nes@hotmail.com

Facebook.com/SantiagoBeltrones3