Un pulmón que pocos conocen en Hermosillo

Desde hace más de 50 años el parque Copacabana ha sido otro de los importantes pulmones del norte de la ciudad, sin embargo, actualmente el paso del tiempo y sobre todo los malvivientes que prácticamente se han adueñado del lugar lo tienen muy descuidado.

HERMOSILLO, SON.- Desde hace más de 50 años el parque Copacabana ha sido otro de los importantes pulmones del norte de la ciudad, sin embargo, actualmente el paso del tiempo y sobre todo los malvivientes que prácticamente se han adueñado del lugar lo tienen muy descuidado.

Está localizado en la colonia Olivares y esta nació en 1955, cuando el Dr. Domingo Olivares que era presidente municipal de Hermosillo planeó esta zona para la gente popular que estaba llegando a la ciudad como los migrantes de la sierra, a estas personas se les daba terrenos que podían pagar con facilidades, afirmó Ignacio Lagarda Lagarda, cronista de la ciudad.

“Y fue el presidente municipal Eduardo Loustaunau Ruiz, quien planeo la construcción del parque Copacabana en la esquina de la López del Castillo y Enrique Quijada a través de la Antigua Junta de Mejoramiento Moral y Material de Hermosillo en 1963, con un costo de 650 mil pesos, aportado por el Ayuntamiento y el Gobierno del Estado”, expuso.

Indicó que la obra consistía en la pavimentación de las 4 calles aledañas a la plaza, además de la banqueta, juegos infantiles, jardines un kiosco, una biblioteca en un edificio que tenía forma redonda.

Señaló que lo que resalta de esta plaza es precisamente el Kiosco que tiene un diseño muy modernista para la época, con esa techumbre volada, casi como si fuera una nave espacial, que rompe con todo el esquema de las construcciones españolas que hay en todas las plazas mexicanas.

“No se sabe porque se le puso Copacabana pero existe el mito de que ahí había antes un puesto de refrescos, en ese terreno baldío, que se llamaba así y de esa forma se le quedó”, externó.

Don Alberto García

En el interior del parque lo que era la biblioteca, ha sido muchas cosas, actualmente la ocupa don Alberto García que tiene una zapatería en su interior, señaló que en 1976 el presidente municipal Ramón Angel Amante Echeverría les dio el local en comodato

El formaba parte de la Asociación de Paraplejicos de Sonora, y ahí sesionaban y además pusieron una carpintería para ayudarse las personas que tenían una discapacidad.

Ellos se reunían los sábados y ese día venían de los pueblos a sesionar y se ayudaban mucho entre ellos mismos, gestionaban sillas de ruedas para compañeros que no tenían y trataban de apoyarse mutuamente en sus necesidades

“En aquellos años ni a los ciegos ni a las personas con algún tipo de discapacidad las sacaban a la calle ahí la tenían encerrada como inservibles entonces aquí venían y nos poníamos a trabajar, también fue centro de recreo y hasta funeraria para nosotros”, apuntó

Dijo que antes de que se las entregaran era una Comandancia de Policía que pusieron aquí por la gran cantidad de delincuentes que había en la zona, la quitaron y ya les dieron el local pero no tenia ni luz.

“De hecho han querido pelear para poner refresquería y han puesto chiquitas por en los alrededores y a la semana ya es tiradero de drogas, hay mucho por aquí, está muy mal la situación”, expuso.

Indicó que en el lugar también el Ayuntamiento guarda sus cosas y él que ahora se dedica a ser zapatero , si ve que le están haciendo daño al parque les pega el grito a los vagos para que no se roben las cosas o lo sigan llenando de grafittis, de hecho por fuera del local está todo pintado en represalia.

Otras cosas que presenta el parque es algunas de las sillas, que son de fierro, las han roto, las rejas de las canchas de basquetbol y futbol rápido también están rotas y el pasto sintético de esta ultima ya está muy maltratado.

En uno de los costados del parque hay una concentración de basura que, según los vecinos ya tiene mucho tiempo y mas tardan en limpiarla que en lo que amanece igual, llena de desechos, los aparatos para hacer ejercicio, algunos ya están rotos o pintados.

Los juegos están incompletos o rotos y hay tres estructuras que al parecer iban a ser una especie de lugar para reuniones o para hacer ejercicio o cualquier otra actividad, pero dos de ellas tienen el armazón de lo que sería el techo pero nada mas y la tercera ni a eso llega.

Según Don Alberto son los malandros, y delincuentes los que se han encargado de romper y dañar todo lo que está mal en el parque, pero hay algunas cosas que se ve que ha sido el tiempo el que se ha encargado de dejar su huella.

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