Urgen capacitaciones para evitar xenofobia contra migrantes

Ante la llegada de migrantes cubanos, venezolanos, nicaragüenses y haitianos a Sonora es necesario que se realice una campaña educativa para evitar las actitudes de xenofobia o discriminación, señaló la investigadora del Colegio de Sonora, Gloria Ciria Valdez-Gardea.

En entrevista con Marcelo Beyliss en el Noticiero EXPRESO 24/7, la experta en temas de migración destacó que es necesario tener claras las estrategias para atender esta compleja realidad que no es privativa de México.

Explicó que evidentemente el país no tiene la capacidad para atender a 30 mil personas que serán expulsadas cada mes por Estados Unidos hacia México, conforme el acuerdo dado a conocer durante la visita del presidente Joe Biden 

“No tenemos la capacidad, evidentemente, porque no contamos con un plan migratorio integral a nivel nacional. Específicamente para atender a las 30 mil personas que se contemplan con el acuerdo migratorio anunciado recientemente. Serían 360 mil personas al año”, comentó.

Análisis basado en años de investigación 

La analista del Colegio de Sonora explicó que lo que estamos viviendo en Sonora y en todo el territorio mexicano no solamente pasa aquí, es importante abrir el zoom y entender que esta situación de movilidad es a nivel mundial, varios países, varias fronteras se están enfrentando a esta movilización humana provocada por el cambio climático, desplazación forzada por el crimen organizado, el despojo de sus recursos, la reunificación familiar, etc., etc.

“De repente se cree que el problema se reduce a la frontera centroamericana o la frontera con Estados Unidos, pero la situación es a nivel mundial, es una situación compleja, con varias aristas, difícil de gestionar, porque en el caso de México tenemos a un vecino, el más poderoso, que si no cooperas ‘te da cuello’, en palabras coloquiales, lo vimos con el expresidente Donald Trump”, señaló la investigadora.

Gloria Ciria Valdez-Gardea puntualizó que hay varios tipos de movilizaciones que están llegando a Sonora: por una parte los hermanos centroamericanos y del sur y centro de México, que radican desde hace meses en las comunidades fronterizas, esperando el asilo en Estados Unidos. Según las estadísticas hay como 70 mil personas en estas condiciones a lo largo de toda la frontera entre México y Estados Unidos. Debido que los trámites son a cuenta gotas, viven en albergues o carpas y algunos rentan.

“Tenemos también a las personas que diariamente transitan para llegar a Estados Unidos que no pueden alcanzar la frontera, que se regresan a Hermosillo o se quedan en las comunidades fronterizas sonorenses. Tenemos también a las personas que están siendo expulsadas bajo el llamado Título 42, por razón de salud, lo cual es una falacia, porque ya terminó la contingencia sanitaria oficialmente”, añadió.

Y tenemos ahora las personas que van a ser recibidas bajo el acuerdo entre México y Estados Unidos, 30 mil al mes.

No hay plan

La investigadora del Colson señaló que ante esta eventualidad, no tenemos la capacidad, evidentemente, porque no contamos con un plan migratorio integral a nivel nacional. “Específicamente para atender a las 30 mil personas que se contemplan con el acuerdo migratorio anunciado recientemente. Serían 360 mil personas al año”, acotó.

La especialista comentó que hay muchas preguntas sin respuestas claras, por ejemplo: ¿En qué consiste este plan?, ¿el plan se integra por campañas de sensibilización a las personas locales para evitar actitudes de xenofobia o discriminación, para tener una actitud abierta y humanitaria? Porque si ya se aprobó el plan, debería incluir esas campañas educativas para la población en general, señaló.

Otras dudas son: ¿Cuáles son los retos que ese plan debería incluir?, ¿que firmó México?, ¿a qué acuerdos llegó?, ¿qué va a pasar con las personas que quieran regresar a sus lugares de origen, se les va a pagar su manutención, se les va a permitir transitar libremente por el territorio mexicano, se les harán válidas sus identificaciones para abrir tarjeta bancaria, para rentar casa, etc.?, ¿qué va a pasar con los niños y niñas en términos de su educación?, ¿cuántas plazas laborales para esas personas van a existir?

Son muchas cosas, no sólamente es “el acuerdo” para ayudar, que es muy bueno, aunque México tuvo que aceptarlo por presiones internacionales, pero eso es tema de otro análisis, reflexionó la investigadora.

Señaló que lo importante es ver qué es lo que hay que hacer ya teniendo la población migrante en casa, necesitamos gestionar, bajar recursos. Un dato: El presupuesto de este año para area de atención a migrantes en Sonora es de 6 millones 646 mil pesos, sólo para nómina, entonces ¿cómo le vamos a hacer? Por ello es importante contar con un plan claro, preciso, detallado, reiteró.

Comentó que más allá de la disponibilidad de espacios en los albergues, debe haber claridad en lo que se va a hacer.

Relató que estos planes se aprobaron en la Ciudad de México pero sin consultar a los académicos, conocedores del tema, sin consultar a los grupos humanitarios, debió haberse consultado a los grupos del sector social, los asesores jurídicos, simplemente a quienes manejan los albergues.

“En el caso de Sonora, tenemos todo para ser un estado ejemplo en el respeto a los derechos humanos de los emigrantes, se ha avanzado por ejemplo con el establecimiento del Consejo Estatal de Atención al Migrante que está establecido en la Ley para la Protección y Atención al Migrante, desde hace 15 años y apenas se instaló el año pasado.

Necesitamos derogar esa Ley de Protección y Atención al Migrante que es un fantasma, un elefante blanco porque ya no está adecuada a las necesidades del estado”, dijo en entrevista.

Gloria Ciria Váldez-Gardea destacó que con Guardia Nacional, con muro estadounidense, con amplia vigilancia tecnológica, la migración va a seguir siempre, pues es parte y consecuencia de los procesos de desigualdad económica y política.

“Esto no va a acabar y hay períodos de aumento y períodos de crisis, por eso necesitamos ordenarla, gestionarla y ver la corresponsabilidad entre los países involucrados”, asentó.

Comentó que en la reunión de los presidentes de México, Estados Unidos y Canadá, se ha hablado de apoyar el desarrollo regional, lo cual es bueno. 

Pero: ¿Cómo se va a hacer?, ¿cuánto tiempo va a tardar para que la población en Centroamérica cuente con los satisfactores importantes para que no tengan que migrar? 

Hay que notar, dijo, que la migración en Centroamérica tiene que ver con la redes sociales, nacionales y transnacionales, ya que muchas familias emigran para reunirse con sus familias que ya tienen mucho tiempo en Estados Unidos, no solo es el hecho de que no tengan para vivir.

La investigadora consideró que es muy bueno que se hable de un acuerdo para evitar actitudes xenofóbicas, ese es un cambio importante con relación a la administración de Donald Trump, pero debe acompañarse con estrategias regionales.

En el caso de Sonora, necesitamos tener claro las estrategias, no sólo con acciones del gobierno, sino en conjunto con la sociedad en general, advirtió.