Recolectores de basura de Empalme señalan al alcalde de dividirlos

Los socios de la cooperativa Arroyos Cuates que mantienen el paro de actividades en protesta por falta de pago del Ayuntamiento de Empalme, señalaron a Francisco Genesta de buscar dividirlos.

GUAYMAS, SON.- Los socios de la cooperativa Arroyos Cuates que mantienen el paro de actividades en protesta por falta de pago del Ayuntamiento de Empalme, señalaron al alcalde, Francisco Genesta, de buscar dividirlos, y en días pasados, logró convencer a varios dirigentes de trabajar en coordinación con él.

Actualmente, dos rutas con camiones proporcionados por algunos dirigentes calificados como “desleales”, operan en la recolección de basura, apoyados por trabajadores del Ayuntamiento, mientras que la ciudadanía, tiene solamente un servicio parcial.

Ángel Mayorquín, uno de los socios, señaló al presidente del Consejo de Administración, Eduardo Meza Velázquez, al secretario Francisco Monárez Valencia, al secretario del Consejo de Vigilancia Rafael Monarez Valencia, y al presidente del consejo de vigilancia, José Cipriano Carpio Valle, de estar inclinándose a favor del alcalde.

“Esa es la parte que está trabajando el presidente, tratar de dividirnos para que todo esto quede sin efecto, somos socios, y esos representantes se están inclinando a favor de él, no sé a qué interés obedezcan, pero nos dejan solos en esta lucha”, expresó.

Mayorquín dijo desconocer el interés particular que cada uno de esos dirigentes pudieran tener, y reveló que, a uno de ellos, la comuna le da trabajo extra en la cuadra municipal, cuando las labores se deben repartir de manera equitativa.

La semana pasada, el Ayuntamiento abonó 580 mil pesos al adeudo de 3 millones, 200 mil pesos, y dice Mayorquín, que esa cantidad no es suficiente para poder laborar con eficacia.

El lunes 19 de octubre, se cumplió una semana del paro de labores y del plantón en el exterior de Palacio Municipal, donde tienen sus unidades estacionadas, pero de aquel grupo que inició, ya no están todos, y quienes permanecen (alrededor de 30 personas entre socios y empleados), aseguran que continuarán en la lucha por que se les finiquite la deuda.