Policías Estatales salvan la vida de un cubano en el desierto de Altar
Oficiales de la Policía Estatal de Seguridad Pública (PESP) salvaron la vida de un cubano que estaba a punto de morir deshidratado en el desierto de Altar.
CABORCA, SON.- Oficiales de la Policía Estatal de Seguridad Pública (PESP) salvaron la vida de un cubano que estaba a punto de morir deshidratado en el desierto de Altar.
Los policías se internaron entre el desierto y el monte para localizar a un hombre que se encontraba en una zona de difícil acceso, quien solicitó ayuda a través del número de emergencia 9-1-1.
La noche del sábado 3 de octubre, la persona extraviada llamó al 9-1-1 solicitando apoyo cuando caminaban desde el municipio de Caborca a Sonoyta.
En su intento por llegar a la línea fronteriza se encontraba perdido, sin alimentos y con falta de agua, presentando problemas de salud.
Oficiales de la PESP organizaron un operativo de búsqueda y rescate, y al día siguiente mantuvieron comunicación con el reportante hasta lograr localizar a Raydel “N”, de 29 años de edad, de origen cubano.
Los agentes hicieron contacto con el cubano alrededor de las 13:00 horas en una zona de difícil acceso, mostrando afectaciones de salud.
Personal de grupo de fuerzas especiales de la PESP se comunicó en todo momento con Raydel “N”, a través de llamadas y mensajes siguiendo su ubicación hasta hallarlo entre un arroyo y debajo de unos árboles, brindando de inmediato los primeros auxilios para reanimarlo.
Los policías estatales poco a poco le suministraron hidratación y posteriormente lo cargaron hasta la zona donde se encontraban las unidades patrulla para trasladarlo a la carretera Caborca – El Arenoso donde ya esperaban personal de Cruz Roja.
El grupo de fuerzas especiales patrulló la zona del desierto y caminó por varias horas hasta lograr ubicar a la víctima, logrando rescatarla y brindarle los primeros auxilios.
La constante capacitación que reciben los agentes estatales y con el apoyo del personal médico que cuenta la PESP se brindó una oportuna atención y junto a personal de Cruz Roja se trasladó a Raydel “N”, a una unidad de salud especializada.
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