“Mi casa está invadida de ratas, me pasan por encima de los pies"; guaymenses se quejan de casa abandonada en el Centro
Una vivienda en ruinas en la calle 17 y avenida 15 del Centro de Guaymas es, desde hace cuatro años, un basurero clandestino y hogar de malvivientes, y los malos olores se pueden percibir a metros de distancia.
GUAYMAS, SON.- Una vivienda en ruinas en la calle 17 y avenida 15 del centro de Guaymas es, desde hace cuatro años, un basurero clandestino y hogar de malvivientes, y los malos olores se pueden percibir a metros de distancia.
La señora Charlin Unger habita en una casa contigua y dice que la suciedad contamina su patio, a donde asegura, llegan ratas resistentes a las trampas, moscas, y que en tres ocasiones entraron a robar cuando ella no estaba.
“Mi casa está invadida de ratones y de ratas y ya no hay manera de que yo las mate, ya estoy conviviendo con ellas, me pasan por encima de los pies, la peste es insoportable, vienen a tirar porquería y media, los que trabajan lavando carros aquí cerca hacen sus necesidades, tienen una toma clandestina de agua y se vienen a bañar”, dijo.
En dos ocasiones, Charline denunció la situación en la Dirección Municipal de Ecología y el dueño ha sido citado pero no acata a la recomendación, y de acuerdo con la ley, si no obedece a la tercera notificación se le impone una multa económica, por lo que su vecina hará otro intento porque el renuente sujeto limpie su propiedad.
“Tienen que tumbar paredes, tirar y cercar porque esto no es vida, se han metido tres veces a robar y me da miedo que un día me vaya a tocar estar y que me puedan hacer algo, estoy muy preocupada, yo me imagino que las autoridades de salubridad todavía existen, que vengan y vean este foco de infección, que se sienten un ratito aquí para que huelan y que vean lo que estamos viviendo, ya no sé que hacer”, explicó.
En dicha esquina se pueden ver deshechos de taquerías (como restos de verdura para preparar salsa), cúmulos de papel sanitario usado, ganchos y etiquetas de una conocida tienda de lencería, excremento, zapatitos de niño sin par, botellas de vidrio, bolsas con líquidos inespecíficos chorreando, un perro muerto dentro de un saco, entre otra basura.