Palominos celebra 50 años de ser un ícono de la gastronomía sonorense
Familiares y seres queridos de don César Pavlovich, quien fuera fundador de este restaurante, festejaron la noche del jueves los 50 años de historia de Palominos.
Con la casa llena, familiares, amigos y seres queridos de don César Pavlovich celebraron este jueves su legado culinario que se corona con los 50 años de Palominos: cinco décadas de convertirse en un ícono de la gastronomía sonorense.
“Antes que nada, bienvenidos a su casa, bienvenidos a Palominos”, dijo el ingeniero Juan Carlos Puebla, yerno de don César Pavlovich y actual propietario del restaurante, mientras inauguraba el brindis que dio paso a una remembranza de momentos y procesos que han hecho posible el crecimiento de “la familia Palominos”.
“Han sido 50 años de esfuerzo, dedicación, de amor por el detalle y servicio; de alegrías y satisfacciones, pero también muchos sacrificios y sinsabores. Desde don César Pavlovich perdura el sello de calidad y servicio, con la idea de llevar lo mejor de la gastronomía de sonora a los paladares más exigentes”, agregó.
Gracias a ello, después de 5 décadas, la gastronomía que enorgullece al estado tiene presencia en Tijuana, Mexicali, Chihuahua, Culiacán, Ciudad de México y, por su puesto, en su casa: Hermosillo.
Para continuar con el festejo, al que se sumó la ocasión del tercer aniversario de Palominos Kino, la Chef Gabriela Gallego Pavlovich, de quien don César fue tío abuelo segundo, introdujo a los comensales algunos de los nuevos platillos que a partir de hoy se pueden encontrar en el menú.
“Estoy muy contenta, muy orgullosa de nuestro trabajo y de todas las fusiones que logramos, manteniendo la tradición sonorense y los ingredientes sonorenses, pero metiéndole un poquito de nuestra cuchara para hacerlo más innovador”, compartió la chef.
Los platillos presentados consistieron en un aguachile de papada asada al carbón con miso de cilantro para el primer tiempo; tacos de short rib con tortilla de harina, puré de cebolla, salsas y tripita de leche, como segundo; y un filete a la pimienta como tercer tiempo. Para el postre, los asistentes disfrutaron de una tortilla sobaquera frita con espuma y salsa de jamoncillo.
Don César Pavlovich, Juan Carlos Puebla, junto a toda “la familia Palominos”, en 50 años de trabajo incesante dieron forma a un legado de tintes inconfundibles: “la fusión de la tradición con la gastronomía moderna”.
Luego del anuncio de que Palominos se expande a tierras estadounidenses, para lo cual ya se tienen gestiones y preparativos en proceso, y de mostrados los nuevos platillos que buscan revolucionar la gastronomía local, nacional y mundial, Karla Puebla Pavlovich, nieta de Don César e hija de Juan Carlos, colocó desde el micrófono el punto final para comenzar la degustación.
“Que mi abuelo nos esté viendo en el cielo, gracias a todos, ¡salud!”, dijo efusiva.