Producción de vacuna, sello de una alianza entre México y Argentina
El acuerdo mexicano-argentino para producir la vacuna AstraZeneca sella una alianza entre los presidentes Alberto Fernández y López Obrador que comenzó con la llegada del argentino al poder, en diciembre de 2019.
CIUDAD DE MÉXICO.- El acuerdo mexicano-argentino para producir la vacuna AstraZeneca sella una alianza entre los presidentes Alberto Fernández y Andrés Manuel López Obrador que comenzó con la llegada del argentino al poder, en diciembre de 2019.
Fernández llegó a la Casa Rosada con una agenda de izquierda, muy distinta a la de su predecesor, Mauricio Macri y, en cambio, cercana a la de López Obrador.
México fue el destino elegido por Fernández para hacer su primer viaje al extranjero, en noviembre pasado, como presidente electo.
López Obrador dijo en aquel momento que el encuentro serviría para “fortalecer las relaciones económicas, comerciales, de amistad” entre los dos países.
Y así ha sucedido.
En esa visita, Fernández también se reunió con el empresario Carlos Slim, cuya fundación ayudará a la producción de la vacuna contra el Covid-19.
Una primera muestra de la alianza fue la petición que hizo Fernández a López Obrador para que mediara con la administradora de fondos BlackRock en las negociaciones sobre la deuda argentina.
“Me habló el presidente de Argentina, Alberto Fernández, que sabía que yo tenía buena relación con Larry Fink”, el CEO de BlackRock, “y que ellos estaban buscando una renegociación de su deuda”, señaló el mexicano en una de sus conferencias matutinas, en junio pasado.
Explicó que la petición se la hizo Fernández durante su encuentro de noviembre y que la propuesta argentina era pagar 41% de la deuda, lo que significaba un descuento de 59%.
“Yo le hablé a Larry Fink… le expliqué, él estaba enterado, ellos empezaron haciendo una propuesta, me explicó que no dependía sólo de ellos. El caso es que iba a proponer a su consejo una disminución del 50 al 55%”.
Ese mismo mes de junio, Estados Unidos daría la noticia de que nombraba a Mauricio Claver-Carone, asesor del presidente Donald Trump para América Latina, como candidato para presidir el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), rompiendo una regla no escrita de que el presidente de esta institución es siempre un latinoamericano.
Argentina, que tiene su propio candidato, Gustavo Beliz, se opuso de inmediato.
Claver-Carone asegura tener el apoyo de 17 países, entre ellos Brasil –se requiere al menos el de 15 de los 28 países americanos-.
La elección está previsto que se realice en una reunión del 12 al 13 de septiembre.
Sin embargo, México se sumó a Argentina para pedir que la elección se posponga hasta 2021, debido a la pandemia de coronavirus.
Costa Rica y Chile se sumaron también a la propuesta, que rechaza Estados Unidos.
El lunes, Claver-Carone denunció ante periodistas lo que llamó “un esfuerzo minoritario, liderado por el gobierno de Argentina, para poder obstaculizar la elección porque no han podido presentar, o no han querido presentar, una visión competitiva”, y advirtió que Estados Unidos se alzará contra “cualquier intento de secuestrar” la votación.
“Quieren robarse el balón y salir corriendo de la cancha. Obviamente así no se juegan los partidos. Hay reglas”, afirmó.
El acuerdo para que México y Argentina produzcan la vacuna de AstraZeneca/Universidad de Oxford para América Latina –excepto Brasil- y que llegue a los países de la región de forma oportuna y a precio accesible –entre 3 y 4 dólares-, es el más reciente capítulo de esta alianza, que se ha vuelto clave ante la división entre derechas e izquierdas que existe en la zona.
EXP/UNI/EV/AGT/2020