Hombre muere, revive y cuenta que "no hay luz al final del túnel"
Kevin Hill, mejor conocido como "el hombre milagroso", causó gran furor en redes sociales por lo que contó luego de que regresara a la vida después de morir por unos minutos.
De acuerdo con "El Clarín", Hill, de 55 años residente de Dervy en Inglaterra, sufre de clacfilaxis, una enfermedad poco común en donde el calcio se va acumulando en los vasos sanguíneos de la grasa y la piel, donde dicha enfermedad puede causar coágulos de sangre, úlceras dolorosas en la piel además de infecciones graves que pueden llevar a la muerte.
Sin embargo, luego de que Hill fuera llevado al hospital, tras presentar complicaciones por esta rara enfermedad, contó su experiencia de morir y volver a la vida a los médicos y la prensa, donde aseguró que pasó por una transición pacífica, “no hay luz al final del túnel”, dijo.
En una publicación realizada por "The Mirror", señaló que Hill quien también es escritor, fue llevado al hospital luego de que su estado de salud empeorara, esto después de que su piel muerta empezará a comerse su piel viva y comenzara a desangrarse ocasionando que su corazón dejara de latir momentos antes de que los médicos los resucitaran.
"No estaba mirando mi cuerpo, pero estaba separado de mi cuerpo. Era como si estuviera en el reino de los espíritus: estaba consciente de lo que estaba pasando, pero tenía mucha paz", detalló.
¿Qué pasó con Kevin?
El hombre británico recuerda haber visto que estaba sangrando y que su condición estaba grave, aunque los médicos lo trataban de salvar, él sabía que ya había muerto.
"Observaba al personal del NHS desde un costado tratando de salvarme, pero yo sabía que había muerto. Estaba separado de mi cuerpo”, comentó.
Agregó que, "es como que fui a dormir y me desperté vivo, y el sangrado se había detenido. Sabía que no era mi hora de morir. Esta situación me ha hecho reenfocar mis prioridades".
Tras permanecer casi un año en el hospital, Kevin volvió a casa para continuar con su proceso de recuperación con el apoyo de su esposa Camille Hill, de 52 años. Los médicos le dijeron que había perdido 65 kg de peso en agua.
“Estoy en las etapas finales de recuperación. En mi pierna derecha, todavía tengo algo de dolor, pero no está cerca del nivel que solía ser, lloraría durante horas”, finalizó.