Vieron crecer tensión en La Mora

Lebaron entierroHabitantes de La Mora contaron a The Washington Post que las cosas cambiaron en los últimos meses, e insistieron en ataque directo

CIUDAD DE MÉXICO.- Antes de la muerte de nueve personas de la familia LeBarón, la gente de la comunidad de La Mora empezó a percibir signos de mayor tensión en la región, tras años de convivir con los cárteles de forma cotidiana, según un reportaje de The Washington Post.

"La masacre se produjo en medio de una guerra territorial cada vez más intensa entre los cárteles que los residentes habían observado de manera nerviosa durante más de un año", señala el reportaje.
"En los últimos meses, hubo indicios de que la paz se estaba deteriorando. El cártel local (de Sonora) exigió que las familias de La Mora dejaran de comprar combustible en Chihuahua, lo que financiaría al cártel rival", agregan.

Según el medio estadounidense, los habitantes de La Mora estaban conscientes de la importancia estratégica de su comunidad, pues cerca se encuentra un camino de tierra que va hacia Estados Unidos y está poco vigilado.

Los familiares insistieron a The Washington Post que rechazaban la versión de que el ataque se tratara de una confusión.

"El Gobierno mexicano ha sugerido que los vehículos fueron atacados por error, pero en La Mora la explicación tiene poco sentido y ha enfurecido a los residentes", apunta el rotativo estadounidense.
"Creen que las familias fueron atacadas intencionalmente por un cártel del vecino estado de Chihuahua, tal vez como venganza por la proximidad de la comunidad al cártel local en Sonora, donde se encuentra La Mora", señalan.

Al notar el aumento en la tensión en la región, los miembros de la familia empezaron a manejar en caravanas, añaden.

"Vimos cómo las cosas se ponían más tensas, pero pensamos lo mismo que siempre hacíamos: no se meterán con los estadounidenses", dijo Amber Langford, de 43 años, una partera en La Mora.
"La gente se empezó a preguntar '¿será hora de regresar a Estados Unidos?', dijo, por su parte, Adam Langford al medio.

De acuerdo con el reportaje, en la última década la comunidad ha tenido que coexistir con la presencia de los cárteles. En ocasiones eran detenidos en los retenes, pero después de asegurarse de que eran de la comunidad, los dejaban ir.

"Básicamente era: 'Nosotros no te molestamos si tú no nos molestas", contó Langford al Post.