“Quería tenerlo todo, ahorita nomás pienso en tener lo necesario”

‘Eduardo’ cometió un grave delito que lo llevó a ser privado de su libertad y recluido en el Itama.

HERMOSILLO, SON.- Fue la ambición, alentada por las malas compañías, lo que llevó a ‘Eduardo’ a hacer ‘cosas malas’ y por eso, desde hace algunos años fue privado de su libertad y recluido en el Instituto de Tratamiento y Aplicación de Medidas para Adolescentes (Itama), cuando apenas era un menor de 17 años edad.

Desde entonces, lo que más desea es levantarse y recibir el desayuno que con tanto amor le preparaba su madre, en vez de la comida que recibe, la cual dijo, es buena, pero no tiene ese sabor a ‘hogar’ de los alimentos que prepara su progenitora.

Años en los que ‘Eduardo’ no sólo ha aprovechado para avanzar en su nivel de estudios o en aprender algún oficio, sino que también ha aprendido a valorar esos pequeños detalles que antes, quizá por su juventud, no tomaba en cuenta.

“Quería tenerlo todo, ahorita nomás pienso en tener lo necesario porque aquí te das cuenta de que el que tengas mucho no te llevará a la felicidad… Extraño tanto un taco de papas con chorizo (de su mamá), son esas cosas que se deben tomar en cuenta”, refirió.

De igual modo ha logrado contener un poco ese explosivo carácter que de alguna manera lo llevó a cometer ese delito, por el cual le dieron la condena máxima que se le da a un menor de edad en México.

Pasan los días con lentitud

El joven de 22 años ha visto pasar los días con lentitud, desde que amanece hasta que anochece, a veces mirando detenidamente la Luna y deseando estar con su familia y tener esa libertad que perdió.

Tiempo que, admitió, no ha sido fácil, pues no hay un solo minuto que no desee estar fuera de esas enormes paredes y esa gran cerca que, tanto a él como al resto de los menores internos, les recuerda que están privados de su libertad.

“Hay veces que sientes que los días no pasan rápido, que nomás estás contando las lunas para ver cuánto tiempo te falta”, expresó el joven con la mirada hacía el piso.

Hasta antes de ingresar al Itama, ‘Eduardo’ tenía una vida estable, donde si bien no había riquezas, tenía lo esencial.

Por ello, ahora lamenta lo ocurrido en aquel momento, sobre todo por su familia.

“Hay personas que lo tienen todo y no saben aprovechar, hay personas que tienen mamá, que tienen unos padres y es malo que lo diga, pero los tiran a la basura. No se dan cuenta de lo que tienen”, aseveró.

Lazos de amistad

Dentro del Itama ‘Eduardo’ ha creado lazos entre sus compañeros, los cuales, aseguró, van más allá de la amistad, pues los considera como sus hermanos, su otra familia.

“No es amistad, es hermandad. Es algo más fuerte, aunque cabe la carrilla, pero todo el tiempo estamos juntos. Aquí somos equitativos, si no consideras a las otras personas te va mal, debemos tener en cuenta al compañero de al lado, mencionó.

Ahora, ‘Eduardo’ solamente piensa en salir y enmendar su vida, ya que quiere continuar sus estudios y cursar una Licenciatura en Seguridad Pública, en Derecho o en Administración.

“Saliendo de aquí, porque antes de salir terminaré la prepa y pienso estudiar una carrera, me visualizo feliz, ya otra persona cambiada, fuera de esas situaciones, quiero aprovechar, pienso estudiar para licenciado en Seguridad Pública, para aprovechar lo malo y guiarlo a lo bueno”, comentó.

Eduardo’ tiene claro que la vida no es ni será nada fácil; sin embargo, está dispuesto a aprender de sus errores y luchar por lograr sus sueños, haciendo las cosas de la manera correcta.

EXP/BB/EV/MAR/2020