"Ositos memorables": una terapia a quienes pierden a su ser querido

Con motivos terapéuticos hacia quienes pierden a un ser querido, Roberto Jesús Villanueva Martínez ha creado los “Ositos memorables HMO”, muñecos hechos con prendas que pertenecieron a la persona fallecida.

HERMOSILLO, SON.- Con motivos terapéuticos hacia quienes pierden a un ser querido, Roberto Jesús Villanueva Martínez ha creado los “Ositos memorables HMO”, muñecos hechos con prendas que pertenecieron a la persona fallecida, para que así los familiares puedan perpetuar la memoria de su ser querido y sobrellevar la pérdida.

El diseñador de moda de alta costura que radica en Hermosillo desde hace varios años, compartió que la idea ya ha sido aplicada en otros lugares del país, pero en Sonora no existían este tipo de productos.

El proyecto comenzó hace un año, cuando Roberto se quedó sin trabajo a raíz de la pandemia, y debido a ello una amiga le propuso hacerle un osito con ropa de su padre que había fallecido.

“Le hice el osito, lo subimos a redes y nunca pensamos que iba a tener tanta popularidad”, expresó.

Proceso de creación

El hombre buscó en internet algunos moldes para la creación de los peluches, pero terminó por modificar el diseño y hacerlos con su toque personal.

Detalló qué hay telas difíciles de manejar, algunas con las que se tardaba hasta tres horas de principio a fin para crear los "ositos", y también hay otras que no se prestan ni para cortar.

“Los encargos más difíciles que he hecho son específicamente de bebés que murieron a los días o meses de nacer, me cuentan los familiares por lo que pasaron, su historia, y me cuesta el poder cortar la tela y elaborarlo, me viene a la mente la personita de quién fue la prenda”, detalló.

Roberto detalló que ha trabajado con varios tamaños, algunos hasta de un metro y medio, y también comentó que si la prenda lleva algún dibujo o bordado trata de rescatarlo y aplicarlo en el osito, para que tenga lo más significativo de cada ser querido.

Desde que comenzó a hecho un aproximado de 3 mil ositos, los cuales se han exportado no solo en municipios de Sonora, sino también a Estados Unidos y Canadá.

“Hay personas que lloran al entregarme la prenda, porque me ha tocado hacer trabajos para niños que perdieron a sus papás y no podían dormir, y con los ositos lo pudieron hacer, es como una terapia, y sentir al ser querido más cerca con los ositos para ir cerrando ciclos y ayudar a sanar ciertas cosas, yo lo veo de esa manera”,concluyó.