“Me traje a mis hijos por temor a que los agarraran”: Geovany y su familia recorren México huyendo de Honduras

Geovany, un hondureño de 32 años tuvo que migrar de Honduras debido a un suceso violento. Ahora tienen cuatro meses recorriendo el país.

HERMOSILLO, SON.- “Nadie quiere dejar a su familia, pero el esfuerzo que hacemos es por darles una vida mejor”, comentaron el padre y la madre de Kevin y Deyberson, de uno y tres años, que a su corta edad han recorrido en cuatro meses casi todo México.

Geovany, de 32 años, el papá de los bebés pertenecía en su natal Honduras a la Policía Militar y tras un suceso violento con una de las más peligrosas pandillas temió por su vida y la de sus hijos, eso lo orilló a migrar con su familia, dos de ellos bebés de brazos.

“Nosotros tenemos cuatro meses de andar, gracias a Dios hemos dado cuenta que la gente en México se ha quitado el bocado de la boca para dárselo a uno”, comentó cuando platicaba de la hospitalidad de los mexicanos.

Geovany es de Tela y sus esposa Alexa, de 22 años, que es un poco tímida es de Tegucigalpa, Honduras, ellos vivían en una colonia conflictiva.

“Yo me vine porque tuve problemas con los pandilleros, yo era parte de las fuerzas armadas en Honduras, era de la policía militar, un compañero golpeó a un pandillero, me culparon y yo vivía en la colonia Los Profesores, donde vivía aquel a quien golpearon. Yo temí por mi familia y por eso mejor me vine, solicité mi baja y me vine”, recordó Geovany.

A pesar de vivir por 4 meses en las calles, Geovany, su esposa y sus hijos se miran limpios, pues es ella la que se encarga de mantener a su familia con una apariencia agradable, mientras su esposo y yo platicamos, ella limpia cariñosamente a sus hijos que corren en la banqueta.

“Me traje a mis hijos por temor a que los agarraran, preferí arriesgarme con ellos”, dijo.

Las Vías del Tren

Geovany y su esposa caminaron solos por mucho tiempo, hasta que un día en las vías del tren encontraron la compañía de dos hondureños más, Marco y Exon, quienes a pesar del camino de lo cansado no pierden la alegría, el buen ánimo y las ganas de llegar a su destino, Estados Unidos.

Exon, tiene 32 años, salió de Honduras en busca de una mejor vida, cuenta que se quedó sin empleo y vio dura la vida en su país, por lo que prefirió migrar.

“México lo ocupo sólo de pasada, mi sueño es pasar a lo Estados Unidos, ayudar a mis familiares en lo que se pueda primeramente Dios”, mencionó.

El grupo de migrantes cuenta que se ha mantenido en contacto con sus familias, cada paso que dan lo informan a sus familiares quienes de lejos bendicen sus pasos con la esperanza de que logren cruzar al vecino país del norte.

Exon conoce a la familia de Geovany de tiempo atrás y cuando supo que ellos estaban en el mismo viaje no dudó en acercarse a ellos para unirse al éxodo en busca de una mejor vida.