Acompañados de un violín, recorren México para cumplir sus sueños
Conocido como Kariel Peña, Luis Alberto interpreta el violín acompañado de su esposa Sarahí, quienes han recorrido el país buscando oportunidades que les ayuden a cumplir sus sueños y metas como lo es arreglar su hogar en la Ciudad de México.
El sueño de arreglar su casa en Ciudad de México, cumplir planes y emprender una aventura son las notas en la pauta que rigen la vida de un joven matrimonio que llegó a Hermosillo para entonar piezas musicales con un violín y una bocina.
Luis Alberto Tovar Peña tiene 31 años, acompañado por su esposa Sarahí Lázaro de 21, están en un viaje de recaudación de fondos para construir una vida, han recorrido partes de la República Mexicana como Guanajuato, la playa de Guayabitos; Mazatlán, Sinaloa y recientemente el desierto de Sonora.
“Sucede que yo trabajé en un circo, quizá algunos hermosillenses lo tengan en la memoria era el show del terror hace cinco años, el cual quedó clausurado, cuando eso ocurrió, yo salí a las calles y corrí con la suerte de llamar la atención de la gente, trabaje por fuera de centros comerciales y semáforos”, compartió Alberto Tovar.
En su viaje han pasado desventuras, se transportan en un Chevy que se quedó atascado y perdió una rótula al intentar llegar a Hermosillo y algunas plazas comerciales de la localidad le han cerrado las puertas al intentar aprovechar el flujo peatonal para ganar unos pesos.
Su escenario han sido los semáforos dónde buscan un enchufe cercano para conectar su bocina y al ritmo de la melodía tratan de que la espera en el control de tráfico no sea tan irritante.
“El plan es trabajar, buscar oportunidades y tratamos de sacar un extra para poder movernos hasta Ensenada, antes de llegar acá nos confiamos de la aplicación de Google Maps y caímos en una zanja, perdimos dinero y tuvimos que remolcar el vehículo”, expresó el violinista.
El violín lo aprendió a utilizar hace siete años y era parte de su show en la cuerda floja; el acto completo de Alberto era cruzando la cuerda a una altura de dos a tres metros mientras tocaba La Tormenta de Vivaldi, él se retiró de los circos por ser una actividad peligrosa.
“Yo hacía cuerda floja, caminaba en un cable de acero a dos o tres metros de altura, actualmente puedo tocar La Tormenta de Vivaldi arriba, pero deje las artes circenses porque no hay un seguro, es un trabajo muy bonito, el escenario es muy bonito, pero la realidad es que no tienes nada asegurado”, agregó.
Kariel Peña, como es conocido Luis Alberto en el medio artístico, tuvo una vida muy gitana mientras pertenecía al circo, compró una casita, pero como se la llevaba viajando, le dejó de dar mantenimiento.
Hace dos años contrajo matrimonio con la joven Sarahí y desde entonces decidió empezar a invertir en su patrimonio. Dentro de sus planes también están estudiar, Sarahí preparase de manera profesional y Kariel seguir preparándose en su carrera como violinista.
CON INFORMACIÓN DE PABLO REYES Y BENJAMÍN VARELA
