En este mes de la Biblia, el arzobispo Ruy Rendón recomienda acercarse a Dios

Septiembre es el mes de la Biblia, tiempo en en el que se debe dar a conocer la Palabra de Dios y se ponga en diálogo con los desafíos del tiempo presente, conocerla, amarla y difundirla.

HERMOSILLO, SON.- Septiembre es el mes de la Biblia, tiempo en en el que se debe dar a conocer la Palabra de Dios y se ponga en diálogo con los desafíos del tiempo presente, conocerla, amarla y difundirla.

Además, esta celebración está relacionada con San Jerónimo, quien la tradujo al latín y cuya fiesta es el 30 de este mes, la traducción que hizo es llamada la “Vulgata” y fue el texto bíblico oficial de la Iglesia Católica hasta la “Neovulgata” en 1979.

Ante esto, Ruy Rendón Leal, arzobispo de Hermosillo, reiteró la invitación a la población para celebrar, vivir y honrar la Palabra de Dios, con un semanario bíblico que organiza cada miércoles la Animación Bíblica de la Pastoral.

Para los que desean acercarse más a la Palabra de Dios, se recomienda la lectura diaria de los textos bíblicos que se proclaman en las misas, así como leer los evangelios, orar con los Salmos o leer una cita diaria del Libro de la Sabiduría.

"Se trata de estudiar una de las más grandes traducciones de la Biblia hecha por biblistas de América Latina, invitamos a todos a participar en este ciclo de conferencias, hay que celebrar dignamente leyendo la escritura, estudiemos este maravilloso libro para que aprovechemos lo que nuestra iglesia diocesana nos ofrece", expresó.

La cita de este ciclo de conferencias será todos los miércoles del mes, en un horario de 19:00 a 21:00 horas, de manera virtual a través de la fan page: Animación Bíblica de la Pastoral.

Algunos de los temas a presentar son: La Asamblea Eclesial de América Latina y el Caribe; La Espiritualidad de San José; La Sinodalidad; San José padre de Jesús, esposo de María y Patrono de la Iglesia.

Agregó que también, por ser el año de San José, gran santo de la iglesia, en esta ocasión será parte de un tema especial, a fin de conocer más acerca de él, así como imitar sus virtudes.

"Esperemos que la palabra conduzca nuestros procesos de discernimiento eclesial, personal y comunitarios. Así como poder descubrir nuestra vocación de pueblo sinodal que peregrina junto al Señor”, concluyó.