No, no hay medicinas

"No, no hay medicinas", escribe Joaquín López-Dóriga en #EnPrivado

La cámara lenta es la velocidad de la justicia.

Florestán

La escasez de medicinas, que el gobierno del presidente López Obrador no ha podido resolver, se atribuye a una serie de decisiones personales en las que llegó a acusar a distribuidores de boicot a la salud de millones de mexicanos, lo se que agravó con el bloqueo inicial a los laboratorios que hoy, reivindicados, pasan sus más prósperos momentos a pesar de las amenazas y siguen actuando como siempre: primero el negocio.

Esta situación hizo crisis con la pandemia de Covid, aquella que llevó al Presidente a decir que le venía como anillo al dedo, lo que nunca ha explicado, y a su gobierno a comprar vacunas donde las vendieran y a precios y condiciones que hoy se mantienen como secreto de Estado.

Pues bien. Cuando ha entrado en sus dos últimos años de gobierno, empezaron a correr el día 1, el abasto de medicinas sigue siendo una crisis que ha tratado de subestimar poniendo por delante el discurso.

Así, el 24 de mayo de 2021, declaró en la mañanera: "Desde luego, ya hay abasto de medicamentos", y no había; el 10 de noviembre, ante la escasez persistente, puso un ultimátum: "Esto es para Juan Ferrer, esto para el doctor Alcocer. Yo no quiero escuchar de que faltan medicamentos y no quiero excusas de ningún tipo. No podemos dormir tranquilos si no hay medicamentos para atender a enfermos".

Hace un mes, el mismo director del Insabi reconoció que ya tenían medicinas pero no la capacidad para distribuirlas, que es como si no las tuvieran. Y la distribución pasó a manos de Birmex, que dirige el general Jens Pedro Lohmann.

Pero tampoco.

El sábado en Guerrero, le gritaron "no hay medicamentos", a lo que respondió: "No hay, pero habrá".

A ver si como el sistema de salud danés, en 2024, que dijo ayer.

RETALES

1.- PESO. Aquí han dejado pasar lo que para México es lo más importante de las elecciones del mes que viene en Estados Unidos: que van a elegir gobernadores en los cuatro estados fronterizos: California, Arizona, Nuevo México y Texas. Y que el resultado podría alterar la vecindad de millones de mexicanos. Pero está en lo del 24;

2.- OVIEDO. Mientras que aquí se le regatea, se le niega el reconocimiento a ese mexicano de excepción y universal que es Eduardo Matos, por rechazar la fundación lunar de la 4-T de la gran Tenochtitlan en 1321, cuando fue en 1325 y sin lunario, España lo distingue con el premio Princesa de Asturias que en el estudio, trabajo, disciplina y rigor de Matos, honra a México y a los mexicanos; y

3.- PANCRACIO. En línea con brincolines, maquillaje de catrinas y dúos legislativos, el Senado anunció para hoy una función de lucha libre rudos vs técnicos en su sede histórica de Xicoténcatl, que ayer, ante las críticas, Ricardo Monreal canceló, pero se echó una cantada ante la falta de brincolín y maquillaje. Así las campañas.

Nos vemos mañana, pero en privado.