Uno entre 100 es menos que Nichols

Uno entre 100 es menos que Nichols, escribe Carlos Marín en #ElAsaltoALaRazón

El embajador de México en Estados Unidos, Esteban Moctezuma, respondió a medias al ultra reaccionario senador Ted Cruz la crítica que lanzó al Gobierno mexicano por su actuación ante los periodistas, pero guarda silencio frente a las expresadas por el subsecretario de Estado Brian Nichols.

¿Por qué la deferencia y diferencia de trato, si Cruz es uno de cien senadores estadounidenses y Nichols el único funcionario que Joe Biden tiene a cargo de los Asuntos del Hemisferio Occidental?

En tanto que Cruz enfatizó que “en 2020 más periodistas fueron asesinados en México que en cualquier otro país” y censuró que López Obrador use “su conferencia para intimidar a uno de los periodistas más importantes” (Carlos Loret de Mola), el Subsecretario abordó el mismo tema en dos ocasiones, primero ante el Comité de Relaciones Exteriores del Senado: “El asesinato de periodistas y de miembros de la sociedad civil es un problema tremendo y una mancha para todos nosotros. Necesitamos tomar acciones para proteger a estos integrantes relevantes de la sociedad mexicana. Es crucial redoblar nuestros esfuerzos para proteger a los políticos, periodistas, integrantes de la sociedad civil. Es vital y hablamos de ello con nuestros colegas mexicanos todo el tiempo”.

Y en un tuit afirmó: “(Es) una mancha para los que trabajamos en defensa y apoyo a #LibertadDePrensa. Necesitamos demandar rendición de cuentas y acciones para proteger a estos importantes miembros de la sociedad”.

Por cuestionable que sea Ted Cruz, quien dijo también que “el colapso acelerado de las instituciones mexicanas y el Estado de Derecho” es “una amenaza para la seguridad nacional de Estados Unidos” y pidió la intervencionista estupidez de que Biden presione a López Obrador, Moctezuma replicó sólo una parte:

“Cuando menciona a los políticos y periodistas muertos en México, suma su voz a muchas, incluyendo la del presidente López Obrador, quien condenó estas terribles acciones y actuó en concordancia para atenderlas (…). Lo invito a extender su visión y mirar hacia el resto del mundo y América Latina, y estoy seguro de que descubrirá una realidad diferente (…). Lo invito a estudiar lo que sucedió en nuestras elecciones federales en junio pasado. Todos los partidos políticos, sin excepción, aceptaron los resultados y siguieron adelante para reforzar nuestra democracia y libertad de expresión…”.

¿Qué tienen que ver aquellos comicios con el reclamo específico sobre el aumento de periodistas asesinados y la rijosa embestida de López Obrador?

Sorprende que el senador (de padre cubano y nacido en Canadá) estrella del siniestro Tea Party (para quien la gente que llegó ilegalmente a EU no merece acceder a la ciudadanía; que está contra los servicios médicos para toda la población y piensa que “la inmensa mayoría de los criminales violentos son demócratas”) merezca más atención del Gobierno mexicano que el desdeñado Subsecretario de Estado en el gobierno de Joe Biden.