Las invasiones de terreno: ¿una ilegalidad o una necesidad social?

La autora es Coordinadora de Bienes del Dominio Público en el Ayuntamiento de Hermosillo

Las invasiones de terreno a veces se dan en áreas verdes, predios de particulares o públicos y generan varios incidentes por personas que invaden cometiendo un delito y se quedan como invasores de predios baldíos de diferentes dimensiones o superficies.

Los invasores, sin embargo, no necesariamente se ubican en la periferia, como comúnmente seda, sino en todo terreno disponible y asequible, en propiedades privadas o Públicas.

A veces, obedecen a una necesidad de los ciudadanos por tener un lugar para construir su casa para vivir, pero no se descartan otras causas asociadas como el factor lucrativo: hay personas que han visto las invasiones como un negocio que genera buenas ganancias, lo que sin duda perjudica a los propietarios y se configura además uno o varios delitos.

Nuestra comunidad no escapa a casos de invasiones de terrenos como son El Tazajal Poniente,La Primero de Julio, Guadalupe Victoria, la 17 de Julio, Josué Torres, San Luis Sur, Trinidad Sánchez Leyva, Machi López, Nueva Victoria, Las Peredas, Adolfo López Mateos, entre otras.

Las autoridades municipales, conscientes de esta situación, a través de las diferentes administraciones, han procurado satisfacer las necesidades de predios habitacionales para la construcción

de viviendas, sólo que en algunos casos se torna difícil debido principalmente a situaciones relacionadas con dictámenes de la Unidad Municipal de Protección Civil.

En ocasiones, las invasiones están en zonas de riesgo como la invasión Guayacán, al Norte de la ciudad, en donde estaba el “basurón”.Se dictaminó que estos predios invadidos están establecidos en un área que representa un riesgo para sus habitantes, debido a que aún en el subsuelo existe la acumulación de gases tóxicos.

En otras invasiones, su regularización ha sido un proceso tardado debido a que existen litigios con las constructoras que son las propietarias de fraccionamientos invadidos.

Se propone implementar nuevas políticas públicas de regularización de invasiones en áreas urbanas y con eso contribuir para que el proceso de crecimiento de la Ciudad sea enfrentado desde todos los ámbitos gubernamentales.

Aunque por lo general se les dé una gran importancia a los programas de regularización , a manera de enfrentar al crecimiento de la ciudad, existen innumerables reflexiones y controversias sobre la naturaleza, posibilidades y puntos de vista de dichos programas.

Citando al abogado y urbanista Brasileño Edesio Fernandes, en su artículo Consideraciones generales sobre las políticas públicas de regularización de asentamientos informales en América Latina, nos dice “No hay respuestas sencillas, no hay respuestas únicas, no hay respuestas rápidas y no hay respuestas baratas... Como los recursos son pocos, tenemos todos que comprender mejor los procesos de producción de la informalidad urbana para mejor enfrentarlos”.

Es necesario prevenir y evitar esta situación de crecimiento de nuevas invasiones en la ciudad, por las consecuencias que tienen para todos, no sólo para los habitantes de las invasiones, sino para las ciudades y para la sociedad urbana en su conjunto.

En conclusión, el reto de promover la regularización sostenible de los asentamientos irregulares está planteado para todos los municipios y ciudades de nuestra sociedad, tratándose de un  norme desafío dirigido principalmente a las entidades Públicas.

La autora es Coordinadora de Bienes del Dominio Público en el Ayuntamiento de Hermosillo,

Maestra especialista en Seguridad Pública y Dra. en Derecho Penal.

licmcguerrero03@gmail.com