Hermosillo necesita moverse

El autor es Arquitecto, Maestro en Ciencias Ambientales y activista por la movilidad sostenible, accesibilidad universal y seguridad vial. Cofundador del despacho de arquitectura y urbanismo: UrbanDot.mx.

Este tiempo que nos ha tocado vivir actualmente, tan diferente a todo lo que conocíamos hasta ahora como el estándar de “vida”, nos ha hecho apreciar de manera especial muchos aspectos de nuestro entorno, así como de nuestra propia seguridad. Un día, de pronto, se nos pidió alejarnos, tomar distancia y descubrir nuevas maneras de trabajar, estudiar, comprar, convivir, movernos y hacer uso del espacio público.

Fue así que comenzamos a comprender la importancia del espacio público más inmediato que tenemos a nuestros hogares: la banqueta. Y es que, como mexicanos, utilizamos la banqueta para mucho más que solo caminar. En la banqueta nos encontramos con otras personas, esperamos el transporte público, compramos cosas de un puesto ambulante, plantamos árboles y nos refugiamos del sol bajo su sombra. En la banqueta comemos tacos y jugamos desde que éramos Bukis.

Y es que las niñas y niños han sido de las personas más afectadas por la cuarentena ya que, a pesar de tener una muy baja probabilidad de enfermarse de manera grave, con el fin de proteger la vida de adultos y, especialmente, personas mayores, las niñas y los niños se han privado de sus amistades, sus clases, convivir con otras personas fuera de casa y de jugar en la calle.

Aunque actualmente, debido a la tecnología, se ve cada vez a menos bukis en la calle jugando, es innegable que todas las personas hemos disfrutado de jugar en la calle y en la banqueta. Pero esto no es únicamente debido a los dispositivos electrónicos y videojuegos, también es provocado gracias a que le hemos ido regalando el espacio público a los automóviles.

Actualmente se considera peligroso que niñas y niños salgan a la calle a jugar, y añoramos el tiempo en que nosotros sí lo podíamos hacer sin tanto riesgo. A pesar de ello, siendo estos adultos estresados en que nos hemos convertido, preferimos movernos rápido en nuestros carros,  sin detenernos y teniendo espacios disponibles en cualquier lugar en donde queramos llegar

a estacionar nuestros vehículos, demandamos a las autoridades que se tapen los baches, se recarpeteen las calles, se sincronicen los semáforos y se agilice el tráfico, lo cual ha hecho que salir a la calle sea riesgoso y cada vez menos posible.

Nos hemos enfocado tanto en nuestra vida adulta que olvidamos a la niñez y sus necesidades, empezando por la seguridad.

Debido a esto, no es de extrañarse que, en México, según estadísticas del INEGI (2015), la principal causa de muerte en niñas, niños y jóvenes sean los accidentes de tránsito.

Con el motivo de revertir esta problemática, está por presentarse y aprobarse la Ley General en Materia de Movilidad y Seguridad Vial. Esta ley ha sido una iniciativa impulsada por sociedad civil, en acompañamiento de personal de SEDATU, de la Cámara de Diputados y del Senado de la República. Gracias a esta alianza, en México ya es considerado como Derecho Humano el Derecho a la Movilidad.

En el caso de nuestra localidad, será necesario que el Congreso del Estado de Sonora generen una armonización de la Ley General, promulgando la Ley en Materia de Movilidad y Seguridad Vial para el Estado de Sonora.

Asimismo, requerimos como ciudadanía comprender la necesidad de tener calles seguras, espacio público habitable y entender que la movilidad no es solamente andar en carro, sino que comprende a todas las personas, desde Peatones y personas con discapacidad, ciclistas, transporte público, transporte de carga y automóviles y motocicletas; con esa jerarquía.

Por ello, como ciudadanía, además de pedirle a las autoridades que tapen los baches, debemos exigirles que se nos provea de banquetas amplias, accesibles y sin obstáculos, con sombra de árboles, ciclovías seguras y transporte público de calidad. En esto también nos tenemos que fijar al momento de revisar propuestas y emitir nuestro voto.

El autor es Arquitecto, Maestro en Ciencias Ambientales y activista por la movilidad sostenible, accesibilidad universal y seguridad vial. Cofundador del despacho de arquitectura y urbanismo: UrbanDot.mx. Miembro de la Red Hermosillo ¿Cómo Vamos?