Estudiantes

La autora es Licenciada en Psicología con Maestría en Terapia Gestalt

Retomando el tema de la semana pasada, con respecto a las clases en línea para universitarios, cuando decíamos que algunos están pasando por situaciones de estrés, falta de motivación y problemas para adaptarse. Sin embargo también hay quienes se han sentido beneficiados, como los que mejoraron sus calificaciones o quienes regresaron a casa con sus padres y están viviendo

esta pandemia acompañados en familia en el calor del hogar.

Este proceso de vivirlo diferente tiene que ver con las herramientas que posee cada persona, ya sea de resiliencia o de una educación para sobrevivir cambios. Los hijos están creciendo y ahora que son mayores de edad, juegan un papel diferente en la familia, ya que entran en una etapa de mayor madurez, y aunque ellos regresen a casa o estén en ella recibiendo el apoyo, también la  proporcionan.

Cada miembro de la familia es importante y se convierte en un equipo necesario para que continúen sus estudios, así como para cuidarse a fin de continuar sanos. Algunos puntos importantes

a enseñarle a los hijos: La vida puede cambiar de un día a otro: Si algo hemos aprendido todos con el Covid-19 es que la vida que llevábamos antes, hoy es totalmente diferente.

Para los  universitarios que estaban acostumbrados a una estructura, ahora les toca adaptarse a una plataforma educativa, a convivir entre computadoras o celulares, adaptarse a una forma diferente de enseñanza y a ser creativos.

Acepta la situación tal y como es: Lo que más ha resultado difícil para algunos jóvenes es aceptar que en este momento no depende de ellos modificar algunas actividades y que sólo pueden

aceptar día a día lo que se vive; aprender a fluir es el mayor reto.

Sigue tus sueños: Si terminar una carrera es tu sueño, entonces no quites el dedo del renglón, esfuérzate, sigue adelante, todo esfuerzo tarde o temprano tendrá su recompensa.

Cuida y ama tu cuerpo: es importante mantenerse activo y ayudar a nuestro cuerpo a estar saludable, hacer ejercicio, dormir a sus horas y comer de forma adecuada.

Exprésate: Es tiempo de hablar, de comunicar lo que te está pasando. Si se te complica con tu familia, busca ayuda, ve a terapia, con alguien de confianza o con algún guía que te pueda apoyar,

sólo busca comunicarte.

Piensa positivo: trata de ver lo bueno en todo y cuando caigas en momentos complicados, también será tiempo de llorar; permite recuperarte y volver a empezar. Nutre tu mente: No todo es

escuela, también hay otras cosas que aprender, hoy en día los talleres en línea prosperan y ayudan a ver un mundo que no veíamos o al cual no teníamos opción o tiempo.

Ríete de la vida: reírse ayuda a la química del cuerpo y a estar sanos. Confía en ti: en ocasiones cuesta trabajo confiar en ti mismo. Cuando vivimos situaciones nuevas o que nos sacan de nuestra zona de confort, recuerda todas tus habilidades, y que aún estás aprendiendo, así que cada reto será una nueva oportunidad de crecer en ti mismo.

Por último, agradece lo que tienes: la salud, la familia, los estudios, los amigos, agradece cada día por un nuevo día y por la oportunidad que te das en la vida, de vivir este momento, en este

tiempo, en este hoy. Algún día contarás este hecho histórico a las siguiente generaciones.

La autora es Licenciada en Psicología con Maestría en Terapia Gestalt.

psic.gladys12@gmail.com