Coaching motivacional para el parrillero hipersensible

El autor es Campeón Nacional de Parrilladas 2017.

La hipersensibilidad es la cualidad opuesta de la resiliencia.

Mientras la gente resiliente acepta con optimismo la crítica cotidiana de los demás y el error propio, la gente hipersensible carece de esta fortaleza emocional.

Veamos el diagnóstico clínico del parrillero hipersensible y el tratamiento adecuado que debe seguir para fortalecer sus bases emocionales.

Definición de hipersensibilidad, según Wikipedia (https://es.wikipedia.org/wiki/Hipersensibilidad) es:

“La hipersensibilidad clásicamente se refiere a una reacción aversiva y exagerada que produce un cuadro patológico causando trastornos, incomodidad y a veces, la muerte súbita”.

Definición del parrillero hipersensible:

“El parrillero hipersensible clásicamente se comporta como niña de 15 años, lloriqueando de forma exagerada ante la crítica de sus asados, porque tiene un cuadro patológico y trastornos de la personalidad, incomodándose con todo y a veces puede ser víctima súbita de un patatús”.

Diagnóstico clínico:

Lloriqueo.- Se le descompone la carita cuando le dicen “se te pasó la sal”.

Patología.- Cuando lo critican se esconde en el baño y le lloran los ojos.

Trastornos.- No sabe si dejar la parrilla para siempre o seguir quemando la carne, es bipolar.

Incomodidad.- Cuando lo critican empieza con tics, se rasca por todos lados, finge la risa.

Patatuses.- Cuando se van todos se desmaya como viejita de Ures cuando sabe que sus nietos van a la laguna.

Cuando invita a la gente a las carnes asadas hace un esfuerzo inhumano por complacerlos, un mandil caro, los mejores cuchillos, tiene todos los “rubs” y asadores y ahumadores de última generación.

Se pasó toda la semana viendo YouTube para cocinar “la mejor receta del universo” cuando lleguen sus invitados: su raza de la prepa.

El siguiente es un fragmento que grabé durante una carne asada en la casa de un parrillero hipersensible.

- El hipersensible: “Ya está todo listo, tengo top sirloin ahumado con “rub” Toscano y lo saque a 140°F y reposé 20 minutos a término rosa para conocedores. Lo acompañé con unos champiñones al ajillo y ejotes franceses con aceite de oliva y ajo”.

- Los camaradas: “¡Qué ridículo eres!, ¿para qué echas a perder la carne con tus “rubs”?, ¿para qué la ahumas?

Dijiste que era carne asada, y ¿por qué le dices top sirloin si es palomilla ridículo?

Nomás te falta dar clases de inglés.

Y luego haces champiñones y ejotes y no hay tortillas.

Nomás te falta dar clases de inglés y hacer la dieta keto.

Eres un ketosexual hahhaaha”.

- El hipersensible: “Tienen que probar cosas nuevas, se nota que no se han paseado”.

- Los camaradas: “¡Qué ridículo eres, nos tienes hartos con tus ahumados, un día asa la carne con pura sal como el Olaiz.

Y para que sepas, venimos llegando del crucero, al que no quisiste ir.

No has agarrado avión desde hace 5 años, el que no se pasea es otro.

Pero te entendemos, estás ahorrando para cambiarle las bandas al cooler, hasta acá lo oigo chillando hahaha”.

El Tratamiento:

Se fueron todos y su esposa se burló de él durante 3 días.

En el último día le dijo: no seas tan sensible.

Después de esto cayó al suelo de un patatús.

Moraleja: “El mundo de los parrilleros no es unido, es un nido de víboras. La hipersensibilidad es el alimento de las hienas. En la parrilla no hay campo para la hipersensibilidad”.

El autor es Campeón Nacional de Parrilladas 2017.