Achicando futuros
La autora es coordinadora del Seminario Niñez Migrante El Colegio de Sonora
Gloria Valdez Gardea escribe:
“ Estoy agradecido de estar vivo, por mis hijos, por estar aquí”, respondió un centroamericano de 17 años a la maestra Miriam en las asesorías escolares que cada miércoles ofrece El Colegio de Sonora.
Este jovencito y otros dos están resguardados en el albergue Tin Otoch esperando se resuelva su trámite de refugio.
La política pública del gobierno federal en el tema migratorio no es clara.
Considero que hay buenas intenciones, pero creo que las intenciones fueron rebasadas por la realidad.
Organizaciones civiles, estudiosos y organismos internacionales documentaron abusos hacia centroamericanos, hacinamientos en estaciones migratorias y albergues, además de poca claridad en lo que sigue una vez que el refugio le sea otorgado o mientras lo esperan en libertad.
Más grave aún, no hay un programa horizontal, transversal para las familias en espera del trámite.
Tal es el caso de unas hermanas que llegaron a las asesorías con sus padres.
Ellos estuvieron resguardados por dos meses en el INM, delegación Sonora.
La familia fue reunificada en las instalaciones del INM después de un mes de estar separada ahí mismo.
Posteriormente solicitaron refugio para quedarse en México, mientras tanto fueron puestos en libertad.
Esta familia guatemalteca tiene ya 3 meses en Hermosillo, dos de ellos en el INM y uno afuera.
Sin trabajo, sin servicio de salud y sin educación para las niñas.
Este es sólo un caso; actualmente hay miles de migrantes solicitantes de refugio en las comunidades de la frontera sur y norte.
Según la COMAR este 2019 hay 62 mil solicitudes de refugio; los estados con solicitudes son: Ciudad de México, Chiapas, Tabasco y Veracruz.
No encontramos datos del número de solicitudes en la frontera norte.
Sin lugar a duda estos 5 niños y adolescentes centroamericanos en las asesorías solicitantes de refugio, muestran que sí hay.
¿Dónde están? ¿Cuántos son? ¿De qué edad? El grupo más vulnerable de solicitantes son los menores migrantes centroamericanos que no están recibiendo educación o salud mientras esperan en libertad el trámite de refugio para quedarse en México.
Ningún estado o país debiera estar por encima del interés superior de la niñez.
Los niños y adolescentes deberían recibir educación independientemente de su nacionalidad. El Seminario Niñez Migrante exhorta a las autoridades para que atienda estos casos.
También exhortamos a las autoridades federales a que tengan claridad en la ruta crítica que deberán seguir los solicitantes de refugio ante la COMAR, y el diseño de un programa transversal, para que los solicitantes de refugio que esperan en libertad sepan a dónde ir, a quién dirigirse y qué hacer.
De lo contrario, estaremos achicando los futuros de los niños, niñas y adolescentes migrantes.
Gloria Valdez Gardea es coordinadora del Seminario Niñez Migrante El Colegio de Sonora gvaldez@colson.edu.mx