Fuga de agua inunda nuevo concreto hidráulico de la calle Yáñez

GUAYMAS, SON.- Una fuga de agua potable inundó el nuevo concreto hidráulico de la calle Yáñez desde hace tres semanas, y de acuerdo con lo dicho por el titular municipal de Infraestructura Urbana y Ecología, Alfonso De la Torre, será el contratista que hizo la obra quien se encargue de repararla, una vez que los inspectores de la dependencia y de la Comisión Estatal del Agua (CEA) determinen el origen de la fuga.

Esa remodelación “integral” se entregó hace pocos meses, después de una larga espera de los vecinos, que por años vivieron en una calle destrozada y con fugas intermitentes de agua potable y drenaje, pero el gusto les duró poco.

En el tramo contiguo de la misma calle (a la altura de la avenida 10), los trabajadores de la constructora asignada para una nueva rehabilitación que complete la vialidad, tuvieron que hacer un bordo para que el líquido no les inunde su obra en proceso, y en la Yáñez, quienes no padecen por la fuga, padecen por la obra, que avanza a un ritmo dificultoso por los cambios de marea que llevan agua de mar al área de trabajo.

La “alberquita”

La mañana del viernes 3 de junio, Marcos Leyva, conocido vendedor de playeras en Guaymas, platicaba y observaba junto con un trabajador de la obra, la “alberquita” que salió en una de las zanjas, y tenían 15 horas esperando saber si el agua provenía del mar o de alguna tubería reventada.

“Han batallado algo porque aquí sube la marea y sale agua de mar, pero ahí la lleva la obra, nos ha afectado con la clientela, pero todo sea para un bien, hay que esperar y revisar que se haga bien todo porque en la última obra aquí a una cuadra ya se descompuso algo y se está tirando agua en el concreto”, dijo Marcos.

“Es un caos, uno tiene que estacionarse en sentido contrario, si ha bajado el volumen de clientes, yo creo que un 30 %”, indicó Raúl Gómez Esquivel, dueño de una barbería de la avenida 10 casi esquina con Yáñez.

Dante, de una cerrajería, comentó que todos los negocios de esa zona están en la misma situación y señaló la estrecha avenida donde estacionan los carros amontonados y en sentido contrario, porque no hay otra manera de acceder.

“Lleva como dos meses y medio la obra, nos comentaron que está programada para tres, pero yo calculo que va a ser más, pero que bueno que están pavimentando porque seguido se colapsaba el drenaje y la CEA ya no podía hacer mucho porque había que cambiar todo completo, traían máquinas y camiones para bombear agua y no se podía arreglar”, dijo.

Esa tarde, Alfonso De la Torre aseguró que han avanzado de acuerdo a lo que se calendarizó y que aún buscan los orígenes de la fuga de agua potable, pero además de esa, durante el tiempo que han laborado en ese punto, han visto brotar otras fugas por el exceso de presión en la tubería de agua potable.

La superficie de trabajo (entre las avenidas 10 y Abelardo L. Rodríguez, luce caótica a simple vista, pero según el funcionario municipal, ya pasó lo más difícil (introducir la red hidrosanitaria), se está tendiendo el material de base y el siguiente paso es colocar el concreto en la calle, las banquetas y guarniciones.