"Ha sido un Festival Ortiz Tirado para los sonorenses"

El Festival Alfonso Ortiz Tirado cerró las actividades de su primer fin de semana respetando la reducción en los aforos en un 50 por ciento.

ÁLAMOS, SON.- El Festival Alfonso Ortiz Tirado cerró las actividades de su primer fin de semana respetando la reducción en los aforos en un 50 por ciento y con una asistencia que apenas y superó los mil visitantes al pueblo mágico de Álamos.

Aunque aún es temprano para hablar de números concretos (según indicó Beatriz Aldaco, titular del ISC), durante el sábado y domingo, las plazas y callejones del pueblo mágico de Álamos tuvieron un repunte del público asistente en comparación al día inaugural del viernes, pero considerablemente menor a lo visto en ediciones pasadas.

Esto no ha mermado la cordialidad y el entusiasmo de los alamenses, que han definido a esta 37 edición del FAOT como un festival hecho con más cariño, de Álamos para Sonora.

"Desde el punto de vista de la salud quizás la gente piensa que no fue tan buena idea, porque es un pueblito aislado, pero yo pienso que es una edición con cariño, con más calidad que cantidad. Un FAOT para los alamenses y para los sonorenses, y para los artistas locales", señaló Jared Ramírez, músico local.

Restricciones

Durante las semanas previas a esta edición del FAOT, las autoridades de gobierno habían reiterado en las restricciones de aforo que caracterizaría al evento, cuidando la salud y la integridad de los asistentes.

Los comercios y establecimientos de comida se abastecieron en un porcentaje menor a lo hecho en ediciones pasadas, sabiendo que en esta ocasión no se realizaría un evento masivo.

"Esta edición ha estado complicada. Es una situación diferente a la de años anteriores. El festival aquí es muy importante por la economía, la mayoría de las familias invierten mucho dinero durante todo el año para hacer su cuartito o abrir su negocio y llegar a este momento del año.

Yo creo que el 85 por ciento de la economía del alamense se basa en el turismo, y este es el evento climático", señaló don Raúl, propietario de una carreta de tacos montada a la vuelta del Callejón del Beso.

"Que se haya realizado, desde el punto de vista de la economía, está excelente", continuó Jared. "Desde el punto de vista cultural también se me hace bien que las propuestas de los escenarios más juveniles sean grupos de Obregón o de Hermosillo, como Los Vecinos Incómodos, que es un grupo que tiene muchísimo tiempo sonando, yo no sé por qué no son tan grandes todavía, tienen muy buena música, y que toquen en foros de aquí y que la gente local tenga la oportunidad de verlos está excelente. Hay grupos muy nuevos y que le den espacios en escenarios más grandes es algo muy positivo".

El Instituto Sonorense de Cultura se propuso en un principio realizar un festival más enfocado en los talentos emergentes y de los pueblos originarios, dando prioridad a los géneros musicales más acordes a los origenes del festival, y no tanto a grandes nombres de la industria de la música que por sí solos convocaran a miles de espectadores.

"Incluso que se vea poca gente como en este momento está bien. Había otras ediciones que eran muy espectaculares, y la gente a veces piensa que entre más masa mejor, pero no. Ahorita es una oportunidad en la que te puedes sentar y escuchar a los artistas y tienes tu espacio. A veces se confunde el FAOT como un festival tipo Coachella o algo así, y no va por ahí. Realmente es un festival de Bel Canto que siempre se ha encargado de fomentar la cultura y eso es algo que ahorita está pasando, porque los foros que hay son accesibles", reiteró Jared.

En cuanto a la seguridad, a todas horas y durante todas las jornadas, elementos municipales y de Protección Civil Estatal se han encargado de resguardar la integridad de los visitantes, cuidando que se respeten los protocolos sanitarios establecidos, así como la no ingesta de bebidas alcohólicas en vía pública.

"Se ve mucha policía, se ve mucha gente como que sí está al pendiente de los cubrebocas, y es una edición cómoda, desde un punto de vista de un local es una edición bonita, poquito regresando a los primeros años del FAOT, pero ya con un montón de cosas aprendidas, como la distribución de los escenarios, el aprovechamiento de espacio, las rutas de salida y todo eso. Y está bien que se hayan animado a hacerlo y esperemos que la gente reaccione de buena manera", concluyó el músico alamense.

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