¿Playa Incluyente o Playa 'El Veneno'? La polémica no descansa en Guaymas
El proyecto ‘Playa Incluyente’ que el Ayuntamiento de Guaymas construye en una zona de riesgo de San Carlos, no ha logrado convencer a la comunidad.
GUAYMAS, SON.- El proyecto ‘Playa Incluyente’ que el Ayuntamiento de Guaymas construye en una zona de riesgo de San Carlos, no ha logrado convencer a la comunidad de ser el lugar adecuado para las personas con dificultades de movilidad, y el Patronato de Bomberos ofrece la opción de que la Playa ‘El Veneno’ en Miramar, cumpla con ese propósito.
Hace tres semanas que dicha área tan concurrida por los visitantes se cerró al público como medida preventiva contra el Covid-19, y en ese lapso, los bomberos (que en los últimos años se han encargado de la limpieza, cobro de estacionamiento y servicios de emergencias en ese lugar), aprovecharon para colocar tarimas de madera con la función de que las sillas de ruedas lleguen a la arena y a las palapas.
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A simple vista la infraestructura es modesta, pero es un ejemplo claro de que dicha playa puede ser adaptada para quienes padecen problemas de motricidad, y la mañana del viernes, el Patronato de Bomberos y el presidente de la asociación civil ‘Por un mejor andar’ Jorge Güereca Mada, ofrecieron detalles sobre este proyecto en una conferencia de prensa.
Güereca Mada recordó que las autoridades municipales nunca escucharon las recomendaciones de su asociación ni de nadie que presentara otra opción, ya que querían de manera urgente invertir un recurso federal de 8 millones de pesos en el proyecto que no considera viable debido a que está en una zona de mareas altas que en una tormenta fuerte terminarían con la infraestructura, además de tener un arroyo enseguida, arena muy gruesa, falta de estacionamiento, entre otros inconvenientes.
El presidente del Patronato de Bomberos Miguel Ángel Torres Rubio, comentó que con 15 mil pesos lograron hacer los primeros trabajos y que no es una inversión cuantiosa ya que el lugar tiene palapas, estacionamiento, arena fina, playa de oleaje muy bajo, y lo caro serían los equipos anfibios para que la gente pueda bañarse en el mar.
“Cuando salió el tema de San Carlos no s pusimos a investigar que se ocupaba para tener una playa incluyente, los datos que se requerían, y nos dimos a la tarea de habilitar un camino para que la gente con discapacidad pueda llegar hasta la arena, las sillas anfibias las cotizamos y tienen un costo de 135 mil pesos cada una, nosotros como patronato no podemos solventar ese costo, pero esto es un levantar la mano de decirle a las autoridades que aquí estamos como opción, dispuestos a trabajar para dar un servicio”, dijo.
Las alternativas que la comuna tiene, son continuar el proyecto en San Carlos e ignorar esta propuesta, o parar la construcción y llevar los equipos anfibios (ya comprados) a Miramar, pero eso será decisión del gobierno, ya sea el actual que preside Sara Valle Dessens (y le quedan 34 días para terminar su mandato) o Karla Córdova González, que será alcaldesa a partir del próximo 16 de septiembre.
