Tiroteos causan crisis nerviosas a niños y abuelos

Templos cerrados, casas baleadas, muertos y heridos que no aparecen, niños y ancianos en crisis nerviosas, calles desoladas, es el panorama que se vive en esta ciudad luego de una semana de enfrentamientos.

HERMOSILLO, SON.- Templos cerrados, casas baleadas, muertos y heridos que no aparecen, niños y ancianos en crisis nerviosas, calles desoladas, parques solitarios, es el panorama que

se vive en esta ciudad luego de una semana de enfrentamientos armados entre delincuentes.

A pesar de ser un día nublado con viento fresco, las calles de Magdalena lucen solitarias y el viento da un aspecto aún más aterrador a esta ciudad castigada por el crimen y por el abandono

de las autoridades.

Las cámaras de vigilancia del Estado fueron destruidas a balazos, la presencia de las autoridades policiacas es casi nula. En varias horas de recorridos sólo dos patrullas fueron vistas, una

de la Guardia Nacional y otra de la Policía Municipal.

En el C4 estaban estacionados tres autos de la Policía Estatal de Seguridad Pública con los motores encendidos.

El alcalde Francisco “El Chato” Zepeda Munro y todos sus funcionarios se encuentran de vacaciones, por lo que el Palacio también está cerrado. La población abandonada por lo que llueven los insultos y mentadas en funcionarios municipales, estatales y federales.

La mañana del pasado lunes los combates iniciaron en la colonia Amaneceres de Kino, cerca de la casa del Comisario de Seguridad Pública. Una casa fue baleada y cuando este reportero se

presentó a tomar foto, fue expulsado por un sujeto armado.

Los combates ocurrieron por igual en el barrio de El Sásabe y El Polvorín, donde la Guardia Nacional realizó disparos por las calles en persecución de alguien que nunca apareció. Tres personas  fueron halladas muertas entre el monte rumbo a la salida a Cucurpe…pero tampoco nadie sabe, y la autoridad no informa, sólo oculta el problema.

Entre tanto, dos adultos y dos niños con síndrome de Down fueron atendidos por crisis nerviosas, lo mismo que ocho ancianos y tres mujeres de edad media, esto sólo durante el fin de semana.