"Quién sabe a dónde se esté yendo el dinero": María Sirvent Bravo sobre los CPS

HERMOSILLO, SON.- Aun cuando el Gobierno Federal está pagando grandes cantidades de dinero a los centros de readaptación social CPS, estos no están cumpliendo sus obligaciones con los reos, afirmó la directora ejecutiva de Documenta A.C., María Sirvent Bravo.

Lo anterior lo comentó durante su participación en el noticiero Expreso 24/7, donde Cynthia García y Daniel Sánchez le dieron voz para expresar su inconformidad respecto a este tema que involucra violaciones a los derechos humanos.

A partir de que se transparentó el gasto público para estas prisiones privadas, se dio a conocer que en Sonora la manutención mensual de una persona reclusa ronda los 74 mil pesos, sin embargo, la activista señaló que lo importante son las condiciones en las que estas empresas mantienen su servicio.

“Aquí el punto no es cuánto cuesta, porque cuesta lo que tendría que costar, siempre y cuando se les esté garantizando la dignidad al interior, cuando se les esté garantizando todos los utensilios, la salud, la alimentación, los programas”.

“Aquí la cosa es que estamos frente a unos CPS en donde esto no se está garantizando; se está pagando este dinero, pero quién sabe a dónde se esté yendo este dinero”, comentó.

Bravo agregó que no obstante que las familias de los reos son quienes tienen que solventar los gastos que por contrato las CPS deberían cubrir, estas personas no están contando con el apoyo del Gobierno Federal, e incluso está siendo cuestionada su manutención.

“Me parece un poco perverso el discurso que está manejando el Gobierno Federal, de decir ‘es que nos está costando esto y son hoteles de 5 estrellas’, me parece que entre líneas está diciendo ‘estas personas no merecerían que se gastara esto en ellos’".

“El Gobierno lo que acordó con los CPS es que les iba a pagar la misma cantidad hubiera 1, 10, 15 o 100 personas, entonces evidentemente por una cuestión de presupuesto le conviene poder trasladar a todos a estos CPS y ya no tener los otros centros”.

Entre los servicios que estas prisiones federales están omitiendo se encuentra el abasto de medicamento, utensilios de salud y limpieza, programas culturales y deportivos, e incluso la alimentación, según dijo.