¿Cuántos accidentes con armas de fuego se han registrado este año en Sonora?

Las armas de fuego no son para jugar y, aunque sean herramientas de trabajo en zonas rurales o serranas, los niños y jóvenes no deben tener acceso a ellas.

HERMOSILLO, SON.- Las armas de fuego no son para jugar y, aunque sean herramientas de trabajo en zonas rurales o serranas, los niños y jóvenes no deben tener acceso a ellas ya que conllevan una responsabilidad penal y legal, además de que brindan cierta superioridad psicológica a quien la porta, que facilita confiarse de llevarlas y ocasionen accidentes fatales.

Así lo aseguraron Ricardo Vásquez, Encargado de la Coordinación Estatal de Protección Civil (CEPC) y un Oficial del Servicio de Materiales de Guerra del Ejército Mexicano.

En lo que va del año, en Sonora se han registrado al menos cinco accidentes con armas de fuego de los que resultaron al menos tres personas muertas entre ellas una niña de 14 años y uno de 10, en Nogales y Esqueda.

El caso más reciente fue el 26 de diciembre en Esqueda; el 31 de julio en Nogales; un presunto “suicidio” en Guaymas el 19 de mayo; el 23 de septiembre en Hermosillo y el 18 de diciembre del 2019 un joven en Navojoa.

Ricardo Vásquez reconoció que hay pueblos en los que un arma es una herramienta de supervivencia para cacería y/o defensa contra criaturas salvajes que amenacen a sus animales, sin embargo, dijo que las armas de fuego son un peligro latente en manos de chicos o grandes.

“En la coordinación estamos consternados con el tema, por lo que trataremos de mitigar los riesgos y estaremos recordando a la ciudadanía el hacer planes y programas de capacitación para disminuir los riesgos desde el plan familiar de Protección Civil”, comentó.

Ricardo Vázquez dijo que es importante que los adultos de las casas mantengan las armas bajo resguardo, descargadas y, si se puede, con algún dispositivo de seguridad especial para que no se disparen.

Por su parte, el oficial del Ejército Mexicano recordó que inicialmente las armas fueron creadas para defender al hombre de animales más grandes y de él mismo, y coincidió con el Coordinador de la CEPC en que un arma se debe almacenar desabastecida o descargada y bien engrasada para cuidarse de la oxidación.

En cuanto a la edad para que una persona use un arma dijo que en México las armas de fuego preferentemente las debe utilizar mayores de edad, ya que conllevan un riesgo inminente y por ende una responsabilidad, además de que para la portación se requiere la licencia respectiva.

Agregó que la Ley Federal de Armas de Fuego y Explosivos específica que solo jornaleros podrán portar un arma de fuego de las permitidas únicamente en el área de trabajo (campo) y subraya que los menores de edad no deben portarlas.

Lo anterior debido a que son un peligro inminente y para utilizarlas se requiere conocimiento previo de su manejo, mantenimiento y consecuencias legales.

“Yo les recomendaría que si tienen hijos pequeños no las manipulen frente a ellos”, resaltó.

Consideró que cualquier arma de fuego da cierta superioridad psicológica a quien la porta y reconoció que algunos niños las toman solo por presumir a sus amigos ignorando su uso, siendo ese el origen de casi todos los accidentes.

“Deberán estar desabastecidas y descargadas en algún lugar que sus hijos no puedan hacer uso de ellas y sobre todo hablar con ellos en caso de ser adolescentes de las responsabilidades penales y consecuencias legales que conlleva su uso”, finalizó.