Se cumplen 8 años del asesinato de José por un agente de la Patrulla Fronteriza

NOGALES, SON.- A ocho años del asesinato a balazos de José Antonio Elena Rodríguez, de 16 años de edad, por las balas de la Patrulla Fronteriza de Estados persiste el reclamo de justicia, dijo Aracely Rodríguez Salazar, madre del menor.

El 10 de octubre del 2012, como a las 23:30 horas hubo un escándalo en la línea internacional, en una zona residencial, pavimentada y alumbrada como si fuera de día; desde Arizona se iluminan la calle Internacional, de Nogales, Sonora con enormes lámparas.

Esa noche hubo pedradas, hacia un muro de más 6 a diez metros de altura y sobre un cerrito de otros tantos metros; es decir, eran como 10 o doce metros de altura.

El menor José Antonio pasaba de Oriente a Poniente, por la banqueta de la calle, a unos pasos de llegar a la esquina con la avenida Ingenieros.

Desde el otro lado del cerco, llegó Lonnie Swartz, oficial de la Patrulla Fronteriza, y sin mediar un segundo sacó su pistola y le asestó nueve balazos al adolescente mexicano.

El dictamen forense indica que el primer balazo lo recibió en la cabeza, y los otros ocho en la espalda cuando estaba herido en la banqueta, boca abajo. Literalmente fue acribillado, con odio o enojo, por Lonnie Swartz.

Expreso contó hasta 34 balazos que impactaron a lo largo de las dos paredes de esa casa, de la esquina de Ingenieros e Internacional.

ABSUELTO

El 22 de noviembre del 2018 Un jurado en una Corte Federal de Tucson, Arizona, declaró no culpable de homicidio involuntario al asesino Lonnie Swartz.

Tras un juicio de un mes de duración, el jurado no llegó a ninguna conclusión en un segundo cargo por homicidio voluntario, por lo que los fiscales argumentaron de inmediato que el agente fronterizo podría ser juzgado de nuevo.

Esa fue la segunda ocasión en que Swartz fue juzgado y declarado no culpable de la muerte de José Antonio Elena Rodríguez, de 16 años.

En el primer juicio, realizado en abril del 2018, Swartz fue declarado inocente del cargo de asesinato en segundo grado, pero el jurado en ese proceso no pudo tomar una decisión sobre cargos menores de homicidio involuntario y homicidio no premeditado.

Los fiscales decidieron volver a intentar el caso, pero también fue declarado no culpable, mediante argumentos legales, ya que el Gobierno de Estados Unidos jamás ha condenado a un soldado o policía por sus crímenes en el extranjero, excepto por los casos documentados por Irak.

Aracely Rodríguez Salazar, rechazó hablar de lo que sigue en el proceso legal, pero siguen en la demanda de justicia. “Los abogados nos tienen prohibido hablar del tema”, comentó.

LA CRUZ

Desde hacía unos meses, y por tercera vez, manos ociosas se habían robado o derribado la cruz que recuerda el lugar y la fecha de este asesinato.

“Algunas veces han arrancado la parte de mármol y la arrojan, otras veces hemos recuperado la cruz en el fierro viejo, luego de andar preguntando por todo Nogales”, dijo la mujer entristecida.

El pasado jueves Expreso Óscar Vega ayudaron a colocar la cruz mediante, ya que de nuevo la habían arrancado, esta vez con un “baffer” pero la localizaron y soldaron de nuevo. Óscar Vega es un líder social que realiza labores altruistas en la comunidad y fue contactado vía este medio por la familia.

La cruz quedó colocada ante la alegría y tristeza de Aracely Rodríguez, quien se prepara para mañana hacer una vigilia para recordar el asesinato de su hijo, y exigir justicia ante el muro que avergüenza a sonorenses y arizonenses.

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Desde hace ocho años, cada día 10 de mes, se reúnen para orar y pedir justicia, ciudadanos mexicanos y sobre todo estadounidenses, quienes son los que más demuestran su enojo contra la Border Patrol.

La cita es las 18:00 horas en la esquina de Internacional e Ingenieros, frente al muro fronterizo.

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