Necesario instruir sobre violencia contra las mujeres: Especialista

HERMOSILLO, SON.- El papel que juegan las autoridades municipales en el proceso de atención a los casos de violencia contra mujeres por parte de su pareja es uno de los menos analizados, por lo que hace falta investigar en el tema para mejorar la atención a las víctimas de este tipo de violencia.

La doctora Claudia Esthela Espinoza Cid, autora del libro “Justicia de barandilla. Un estudio sobre atención a la violencia contra las mujeres en las relaciones de pareja”, aseveró que es bien sabido que son pocas las mujeres que acuden a una instancia pública a pedir ayuda, pero de las pocas que acuden, la mayoría lo hace directamente a la policía y no con el Ministerio Público.

Durante su investigación, realizada entre 2014 y 2017, se entrevistó con víctimas, agresores, elementos de la policía preventiva y de tránsito municipal, jueces calificadores y médicos legistas, para conocer sus percepciones y puntos de vista sobre la violencia ejercida hacia las mujeres y comprender su visión sobre los problemas de género que atienden en estos casos.

“Yo pude constatar que efectivamente hay vacíos en la capacitación, a veces, más bien por iniciativa de los propios policías y los hombres y mujeres comprometidos por atender bien estos casos, ellos por su cuenta van y buscan inscribirse en capacitaciones, pero no hay un plan organizado o institucionalizado para la capacitación”, explicó.

Por ese motivo, dijo que es común que los casos de violencia sexual en una pareja no sean atendidos correctamente, toda vez que suele priorizarse la agresión física, a pesar de que la ley habla sobre un amplio espectro de violencia que debe ser atendida.

“Lo que yo encuentro es que esta falta de capacitación a los policías les impide abordar adecuadamente el tema, dar un tratamiento sensible y empático hacia las víctimas, esto tiene que ver con que las capacitaciones sean esporádicas, no se mantienen por periodos prolongados y no hay actualización”, comentó.

Otro punto que Espinoza Cid destacó es que el conjunto de ideas, valores y percepciones entre víctimas, agresores y policías era muy parecido, pues existen visiones tradicionalistas sobre la pareja así como el rol de padre como principal figura de autoridad en la familia.

La académica mencionó que la cultura de género en la localidad no solo influye en las ideas sobre las que el agresor justifica sus actos, sino también en lo que una víctima piensa sobre la unidad familiar; asimismo, esto también se comparte por los funcionarios, de manera que esto condiciona la atención de los casos de violencia familiar.

Ante esta situación, señaló la importancia de sensibilizar sobre el tema a las generaciones en formación profesional, pues muchos de ellos serán servidores públicos. Además, es necesario capacitar a más policías con perspectiva de género sobre atención, prevención y erradicación de la violencia institucional.