El dolor de madre las convirtió en buscadoras

A un año de trabajos, las Madres Buscadoras de Sonora han encontrado 121 osamentas y cuerpos humanos en diferentes estados de descomposición.

HERMOSILLO, SON.- El trabajo de los colectivos de búsqueda de personas desaparecidas han colocado a Sonora en el cuarto lugar nacional con fosas clandestinas, es decir, el estado se ubica sobre estados como Veracruz, Tabasco, Sinaloa o Michoacán, según datos de la Comisión Nacional de Búsqueda.

Hace un año el dolor de dos madres fue el cimiento de uno de los colectivos de búsqueda más importantes del noroeste del país, se trata de Madres Buscadoras de Sonora (MBS).

Martha Cecilia Delgado y Ceci Patricia Flores Armenta fueron desterradas del colectivo Guerreras Buscadoras por diferencias irreconciliables, pues, al parecer, el colectivo se volvió un nido de intrigas, envidias y chismes entre los miembros.

Buscan a sus tres hijos

Ceci y Paty, como las conocen de cariño buscan a sus tres hijos, Ceci a Jesús Ramón Martínez Delgado, levantado y desaparecido el 02 de diciembre del 2018 por elementos de la Policía Estatal y Agentes Ministeriales de Investigación Criminal (AMIC) que lo subieron a una patrulla a las afueras de su negocio.

Paty por su parte, perdió a su hijo Alejandro en Sinaloa cuando trabajaba en las labores del campo y a Marco Antonio, después de que un comando armado lo “levantara” en Bahía de Kino el 4 de mayo del 2019.

Ambas salieron por su cuenta desde el primer día de su desaparición. Al tiempo, se unieron al colectivo donde se conocieron y trabajaron coordinadas, pero luego comenzaron las fricciones.

El 22 de junio del año pasado, las mujeres dieron con la ubicación de una supuesta casa de seguridad y tortura ubicada al poniente de Hermosillo, en las orillas, hasta ahí, las llevó un joven que logó escapar del lugar y que aseguró se encontraba en compañía de dos jóvenes y una mujer más.

“Esa persona estuvo privada de la libertad aquí con otra persona, lograron escapar los dos, con los dientes se quitaron las ataduras el uno al otro y entonces huyeron juntos pero quedaron tres personas más, dos hombres y una mujer, pero en lo que nosotros llegamos les dimos tiempo suficiente para que los sacaran y se los llevaran”, contaron en aquel momento.

Se extienden a otros municipios

Las búsquedas continuaron por todo Hermosillo y sus alrededores, posteriormente se extendieron a Cajeme, Guaymas, Caborca, Puerto Peñasco y Nogales, donde los hallazgos llegaron a 121.

En su poder tienen dato de zonas de exterminio en Sonora, las cuales están ubicadas principalmente en la Costa de Hermosillo, Puerto Peñasco y al sur de Hermosillo en la colonia Altares, en esos lugares donde han encontrado el mayor numero de cuerpos y osamentas.

A un año de trabajos, las Madres Buscadoras de Sonora han encontrado 121 osamentas y cuerpos humanos en diferentes estados de muerte; a 356 días de trabajo y tienen en su padrón un total de 500 desaparecidos, es decir 1.37 desparecidos diarios.

En las historias de cada una de las personas que buscan destacan en al menos un 40% de los casos que en las desapariciones han tenido relación personal de seguridad pública y de investigaciones, cuyos agentes a pesar de haber sido señalados continúan activos y en labores.

El grupo de Madres Buscadoras de Sonora está liderado por Ceci Delgado y Paty Flores, tiene representaciones en Guaymas, Nogales, Caborca, Altar y Cajeme. Toda la información que surge es procesada por Josefina Liliana López López quien se encarga de la base de datos de colectivo.