El papa Francisco condena en misa violencia machista

El Papa condenó la violencia machista y reivindicó el papel de las mujeres en la Iglesia durante la celebración de la primera misa del año en la basílica vaticana en la solemnidad de santa María, madre de Dios.

CIUDAD DE MÉXICO.- El Papa condenó la violencia machista y reivindicó el papel de las mujeres en la Iglesia durante la celebración de la primera misa del año en la basílica vaticana en la solemnidad de santa María, madre de Dios.

“Cuánta violencia hay contra las mujeres. Basta, herir a una mujer es ultrajar a Dios, que tomó la humanidad de una mujer, no de un ángel, sino directamente de una mujer”, exclamó el Santo Padre en esta jornada en la que se celebra la solemnidad de santa María, madre de Dios y en la que también se ha establecido, desde hace 55 años, la Jornada Mundial de la Paz.

“La Iglesia es madre, es mujer. Por ello, desde este respuesta se puede encontrar el lugar de la mujer en la Iglesia”, recalcó.

En la homilía, el Pontífice presentó el pesebre de Belén como “la prueba de que Dios está junto a los pastores; nace en un pesebre, un objeto muy conocido para ellos, mostrándose así cercano y familiar”.

Sin una cuna

“Su pobreza es una hermosa noticia para todos, especialmente para los marginados, para los rechazados, para quienes no cuentan para el mundo. Dios llega allí sin ninguna vía preferencial, sin siquiera una cuna. Aquí está la belleza de verlo recostado en un pesebre”, apuntó.

El Vicario de Cristo destacó que María “tuvo que pasar por ‘el escándalo del pesebre’”. “Pensemos en el sufrimiento de la Madre de Dios. ¿Qué hay más cruel para una madre que ver a su propio hijo sufrir la miseria? Es desconsolador. No se podría reprochar a María si se hubiera quejado por toda esa inesperada desolación. Pero no se desanimó. No se desahogó, sino que permaneció en silencio”, añadió.

Francisco ha invitado a todos los católicos a imitar la actitud de María de “conservar meditando”. “Porque hay ocasiones en que también nosotros tenemos que sobrellevar algunos 'escándalos del pesebre’, agregó. Tenemos la esperanza de que todo va a salir bien, pero de repente cae, como un rayo de la nada, un problema inesperado”.

En este sentido, resaltó que la Madre de Dios enseña a sacar provecho de este choque. “Nos descubre que es necesario, que es el camino angosto para llegar a la meta, la cruz sin la cual no se resucita. Es como un parto doloroso, que da vida a una fe más madura”, puntualizó.