CEMEX replantea sus objetivos pensando en el medio ambiente

HERMOSILLO, SON.- En su objetivo de ser una empresa aliada del medio ambiente, CEMEX ha anunciado que su nueva meta será todavía más agresiva que la anterior: busca estar por debajo de 475 kg de CO2 por tonelada, lo cual representa una reducción aproximada del 40% de emisión de CO2 para el año 2030. Dicho nuevo objetivo está alineado al escenario de debajo de dos grados centígrados de la SBTi.

Como el mayor productor del concreto en el occidente, CEMEX se ha comprometido con reducir las emisiones de CO2 en un 35%, llegando a 165 Kg de CO2 por metro cúbico para el 2030. La importancia del concreto es mayúscula, ya que ofrece opciones adicionales más allá del cemento para eliminar el carbono, sumando esfuerzos para alcanzar el plan de neutralidad para el año 2050, dicho objetivo representa un ambicioso y ejemplar plan a seguir que la empresa se ha puesto.

“La acción climática es el mayor desafío de nuestro tiempo y CEMEX toma medidas decisivas para enfrentarlo”, indicó Fernando González Olivieri, Director General de CEMEX.

“Nos comprometemos a mantener el liderazgo en la industria en acción climática, no solo porque crea valor, sino más importante aún, porque es lo correcto. CEMEX está construyendo un mejor futuro, y ese futuro debe ser sostenible”, reiteró.

Serán aproximadamente 60 millones de dolares anuales los que la compañía anticipa invertir para alcanzar la nueva meta en 2030, siendo un pilar de la estrategia "Operación Resiliencia de CEMEX" junto al programa "Futuro en Acción", específicamente planeado y diseñado para reducir lo más posible la huella de carbono y sus emisiones.

Con procesos operativos existentes, materiales y tecnología de punta que viene implementando la empresa exitosamente en Europa desde hace dos décadas, es como CEMEX traza la ruta para las metas en 2025 y 2030. En ello interviene el uso de combustibles alternos con alto contenido de biomasa, inyección de hidrógeno, clínker de baja temperatura y bajo CO2, materias primas descarbonatadas, optimización del consumo calorífico de los hornos y la reducción del factor clínker mediante mayor adopción de cementos con adiciones.