Dejar el tabaco: un proceso difícil pero no imposible

HERMOSILLO, SON.- La salud y la economía motivan a las personas a dejar el hábito del cigarro y enfrentar el difícil proceso que significa combatir con una de las principales adicciones causantes de enfermedades como hipertensión, afecciones cardio respiratorias, debilitamiento del sistema circulatorio y cáncer.

El tabaco, materia prima del cigarrillo, se trata de una planta cuyas hojas se fuman, mastican o aspiran, con el fin de experimentar una variedad de efectos presuntamente relajantes; contiene nicotina misma sustancia altamente adictiva y hasta siete mil químicos distintos causantes de diferentes variantes de cáncer.

Algunas personas compartieron para Expreso sus experiencias y motivos por los cuales optaron por dejar el consumo de cigarros, en la cual todos coincidieron que su salud y su economía hicieron a su vez más pronta la urgencia de dejar de consumirlo.

Martín Villegas Ibarra, de 30 años, fue consumidor de tabaco por 10 años, narró que desde sus 17 años comenzó a fumar para encajar en su circulo de amigos, lo cual gradualmente se volvió un vicio; durante años se propuso dejar el habito sin embargo le resultó sumamente difícil, sin embargo una experiencia le abrió los ojos.

“Yo decía ´lo puedo dejar´, ´no es un vicio´, ´es esto y aquello´, el 100% de las veces que lo intenté dejar no pude, por lo mismo de que realmente decía que lo quería dejar, pero no lo quería dejar, entonces en el 2017, un amigo con problema de drogas fue a un lugar para desintoxicarse, y fuimos a visitarlo y miré a la gente luchando con mucha voluntad, para dejar un vicio distinto al cigarro, drogas principalmente, me cuestioné ´¿Que pasa conmigo?, yo siempre he dicho que no tengo un vicio y que puedo dejarlo cuando quiera, ¿pero no tengo acaso voluntad?´, entonces días después me propuse dejarlo fumando mi ultimo cigarro”.

El matrimonio conformado por María García Lucero y Arturo Moreno Yocupicio, ambos de 64 años, tenían el habito de fumar muy arraigado durante años, no obstante al comenzar a notar los problemas de salud como alergias, hipertensión e incluso problemas cardíacos, ademas del enorme gasto que significaba para su bolsillo, de forma súbita dejaron de hacerlo.

“Empezamos a notar algunos malestares, el daño que nos hacia en la salud, para respirar, en la piel, comprábamos los paquetes grandes y de ese agarrábamos algunas cajetillas y no salía ganancia de este producto para el negocio, cuando lo dejamos, yo hasta asco llegué a sentir al ver a otras personas fumando”.

Por su parte, María Lourdes Gutiérrez, señaló que solía fumar en exceso; sin importar que ya tuviera una hija pequeña, se tomaba el tiempo para fumar afuera de su casa y hacer un gasto fuerte en cigarros; fue hasta el momento en que su hermana menor enfermó gravemente, que a manera de “manda” se propuso dejar el cigarro.

“Dejé el cigarro cuando mi hermana se enfermó y estuvo internada, le pedí a Dios por su salud a cambio de dejar el cigarro; ella se recuperó y desde entonces ya no fumo”.