Tragedia de El Ranchito perturba la vida de familias hermosillenses

HERMOSILLO.- Las balas que un grupo de hombres armados dispararon en el barrio El Ranchito, no solamente arrancaron la vida de un bebé de tres semanas de nacido al incrustarse en su cabeza y la de un joven de 23 años, también impactaron en la estatua de una Virgen de Guadalupe, conmocionando para siempre la vida de las familias de esta colonia que es de las más antiguas de Hermosillo.

En la cocina de uno de los domicilios de las víctimas que atestiguaron los hechos, quedó la estatua de la Virgen con el orificio de una bala que atravesó el yeso hasta incrustarse en la pared, otro disparo quedó en la cocina integral, pero al final de cuentas la familia da gracias a Dios de que las ojivas solamente alcanzaron cosas materiales.

“Estaba trabajando cuando ocurrieron los hechos, soy estudiante y tengo una carreta de sushis, pero temo que ya no voy a poder trabajar”, narró un joven que atestiguó los hechos e incluso fue atacado a cachazos por los gatilleros, que lo dejaron sangrando de la cabeza y molido a patadas.

Éste recordó con terror, lo que sintió al estar tirado en el piso, con una pistola en la cabeza y ver cómo los sicarios disparaban al interior de su casa donde estaba su familia, una de estas balas fue la que impactó la Virgen.

“¿Cómo voy a estar yo tranquila sabiendo que está mi hijo, que es un excelente estudiante, trabajando aquí, expuesto a que esos hombres armados vuelvan y Dios guarde arremetan de nuevo contra inocentes?”, lamentó la madre.

EXP/DS/EV/FEB/2020