Quedarán a Fernando secuelas de por vida

Aunque se recupera de manera satisfactoria de sus quemaduras, pasará Navidad y Año Nuevo en el Hospital Shriners.

HERMOSILLO, SON.- Luis Fernando Payán, quien sobrevivió a la explosión de un transformador de la Comisión Federal de Electricidad, pasará la Navidad y el Año Nuevo internado en el Hospital Shriners de Sacramento, California, donde permanecerá sujeto a un duro proceso de rehabilitación al menos hasta el mes de febrero.

Afortunadamente la salud del menor va evolucionando bien, pero la División Noroeste de la paraestatal aún no asume los gastos y lo que ofrece como indemnización para la reparación del daño es muy poco, según la familia.

Los padres del menor afectado exigen a la CFE una pensión vitalicia para el joven de 16 años porque aseguran que quedará con secuelas para siempre, como quemaduras en el 80% de su rostro, brazos y piernas, además de que los doctores tuvieron que utilizar la poca piel sana que le quedó para los injertos.

Luis se recupera

A mil 800 kilómetros de su casa, Beatriz Pérez, quien tuvo que pedir un permiso en el trabajo para acompañar a su hijo al hospital de Sacramento para que reciba la atención médica especializada, comentó a EXPRESO vía telefónica que Luis Fernando se ha estado recuperando satisfactoriamente y que ayer jueves le retiraron tubos, catéter y electrodos que estaban conectados a su cuerpo para monitorearlo.

Sin embargo, el joven de 16 años requerirá más operaciones de injerto e intervenciones quirúrgicas, cuando menos hasta los 21 años, edad en la que el cuerpo concluye su desarrollo.

También usará un traje y máscara hecha de un material especial para que su piel no quede muy arrugada y disminuyan las cicatrices; todos estos procesos son traumáticos y dejarán secuelas visibles de por vida en el menor.

“Tiene quemaduras en piernas, manos y cara; en sus manos y cara le pusieron injertos con piel sana de la espalda, más o menos el 80% de su rostro requirió injertos, pero continúan las curaciones porque persiste el riesgo de infecciones; él va a necesitar una máscara y un traje especial, donde le ponen medicamento y un soporte para que su piel no quede tan arrugada, será como un pasamontaña, mangas, también una camisa en el torso y pantaloncillo”, detalló Beatriz Pérez.

La madre explicó que en total podrían ser dos máscaras, una trasparente para el día y otra para las noches.

EXP/DS/EV/DIC/2019