Un pequeño letrero...

#TemploMayor Un pequeño letrero, pegado en las paredes de Palacio Nacional, resumía el reclamo social en contra de Andrés Manuel López Obrador...

UN PEQUEÑO letrero, pegado en las paredes de Palacio Nacional, resumía el reclamo social en contra de Andrés Manuel López Obrador y su indiferencia ante los feminicidios:

“¿A cuánto el cachito de justicia?”.

Y ES QUE el Presidente se muestra más interesado en vender los cachitos de su lotería, que en ofrecer una propuesta concreta, acciones, no buenos deseos, para evitar que cada día 10 mujeres no vuelvan vivas a sus casas.

Vaya, ni siquiera quiso entrarle a la idea de una fiscalía para feminicidios a nivel federal.

Lo dejó en manos del Legislativo y de los estados.

Además, cuando le piden hablar de las mujeres asesinadas, López Obrador opta por culpar al neoliberalismo o convertirse él en la víctima.

HASTA AHORA, que se sepa, ni siquiera un breve pésame ha expresado a la familia de Fátima, la niña asesinada en la Ciudad de México.

No fuera la mamá de “El Chapo”, porque hasta visa le consigue.

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TODO INDICA que hoy se acaba el reinado, perdón, la presidencia de Yeidckol Polevnsky al frente de Morena.

Si no hay cambio de última hora, los magistrados del Tribunal Electoral le levantarán la mano a Alfonso Ramírez Cuéllar, quien como interino se encargará del proceso interno para definir una nueva dirigencia.

CASUALMENTE ayer 102 diputados morenistas le dieron su respaldo, aunque extrañamente el coordinador Mario Delgado no firmó el espaldarazo.

¿Será que no tenía bolígrafo o que no está de acuerdo con el ungimiento?

Es pregunta.

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POR CIERTO que en la bancada de Morena andan muy gallitos diciendo que van a nombrar a los cuatro nuevos consejeros del INE a su puritito gusto.

Que ya hicieron cuentas y que sí les alcanza para sacar la aplanadora en San Lázaro.

¡Pfff!

Del “ni cuotas, ni cuates”, nos encaminamos al “es mi cuota, son mis cuates”.

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ES CURIOSO cómo los gobernadores buscan seguir el ejemplo presidencial de sacarle mayor jugo a las benditas redes sociales.

El mexiquense Alfredo del Mazo, por ejemplo, ayer se salió de programa y cayó de sorpresa en el hospital de Luvianos, no sólo para saludar a los pacientes, sino pa’ checar el abasto con transmisión en vivo.

El yucateco Mauricio Vila es el que más tuitea, seguido por JaimeEl BroncoRodríguez, que en mucho le debe a Facebook haber llegado al gobierno.

Y el morelense Cuauhtémoc Blanco es el que más seguidores tiene... aunque no necesariamente por su labor de gobierno.