Primera batalla por 2024 y el regreso de Bejarano

Primera batalla por 2024 y el regreso de Bejarano, escribe Salvador García Soto en #SerpientesYEscaleras

En la definición de las candidaturas de este 2021, los aspirantes de Morena a la sucesión de 2024 comenzaron a medir fuerzas y a tratar de colocar posiciones, tanto en las diputaciones federales como en las alcaldías, gubernaturas y congresos locales. Esa dinámica, en la que el presidente López Obrador repartió algunas posiciones para personajes cercanos de la 4T, como Ricardo Monreal en Zacatecas, Claudia Sheinbaum como encargada de todas las candidaturas en la CDMX y Lázaro Cárdenas en Michoacán, ocasionó ya los primeros choques en la guerra interna por la candidatura presidencial del morenismo.

El enfrentamiento abierto entre la Jefa de Gobierno y el líder morenista, que data desde 2018 cuando se enfrentaron por la candidatura al Gobierno capitalino, se agudizó en estos dos años del gobierno lopezobradorista cuando Ricardo Monreal se alió con el canciller Marcelo Ebrard Casaubón e hicieron un frente común para ganar la dirigencia nacional de Morena apoyando los dos a Mario Delgado, mientras Sheinbaum apostó primero por Bertha Luján y cuando la presidenta del Consejo Nacional morenista no le creció, impulsó la controvertida candidatura de Porfirio Muñoz Ledo en la que logró colocar también a la senadora Citlali Hernández, quien finalmente pudo quedar como la cuña de Delgado en la Secretaría General.

En ese nivel de confrontación llegó 2021 y Sheinbaum decidió ejercer su papel de jefa política del morenismo en la CDMX, donde Monreal tenía un enclave estratégico para él y que pretendía mantener en su juego político rumbo a 2024: la estratégica Alcaldía de Cuauhtémoc, una de las de mayor presupuesto en la capital. El zacatecano tenía dos gentes con las que buscaba mantener el control de la Cuauhtémoc, de un lado el alcalde Néstor Núñez que buscaba la reelección a la que tiene derecho y del otro José Luis Rodríguez "El Puma", quien buscaba también reelegirse por el Distrito 12 local en esa demarcación.

Pero la Jefa de Gobierno tomó la decisión de arrebatarle el control de la Cuauhtémoc al monrealismo y, en una jugada estratégica aunque también muy cuestionable, decidió hacer una alianza con el controvertido René Bejarano, para apoyar a la diputada Dolores Padierna para que repitiera como candidata a la Alcaldía. Pero antes de desplazar a los monrealistas y sellar su pacto con el matrimonio Bejarano-Padierna, Sheinbaum se cercioró de que no hubiera traiciones y convocó a Mario Delgado para recordarle que ella era, por disposición del Presidente, la única que definiría las candidaturas en la CDMX. Con la aceptación de Delgado, que así pagaba el apoyo que antes le había dado Monreal para ser presidente nacional de Morena, se selló finalmente la que sería la primera declaratoria de guerra entre los precandidatos de la 4T a 2024.

Así que el pleito Sheinbaum vs. Monreal no es nuevo pero subió de nivel en este 2021 y se convierte en el primer episodio de la guerra por la sucesión presidencial de este sexenio. La Jefa de Gobierno tomó la decisión de entregarse a los brazos de un viejo lobo como René Bejarando, que vuelve por sus fueros y sus posiciones de poder, si es que alguna vez se fue realmente del lopezobradorismo, mientras el líder del Senado sigue la máxima del plato frío de la venganza, mientras arma su tablero nacional no sólo en Zacatecas, sino también en Michoacán. Y mientras la Jefa de Gobierno y el líder senatorial ya se enfrascan en la primera batalla rumbo a 2024, el que observa a lo lejos, ocupado y atareado con el tema de las vacunas contra el Covid es el canciller Marcelo Ebrard, que no parece tener prisa, pero tampoco quita la mira de la candidatura presidencial. Quizás Marcelo esté apostando primero a poder hacer realidad su "misión cumplida" hasta que de verdad lleguen los 140 millones de dosis de vacunas que le prometieron al Presidente. Y una vez que pase la vacunación y todos los mexicanos hayan sido inmunizados, entonces sí tal vez Ebrard empiece a moverse y entre a la guerra con Monreal y Sheinbaum… Los dados mandan Serpiente Doble. Semana difícil.