PARA QUE SE ENTIENDA BIEN…
***
PARA QUE SE ENTIENDA BIEN…
Ayer el sonorense secretario de Seguridad Pública del país, Alfonso Durazo Montaño, hizo algunas precisiones que vale la pena subrayar: primero, recalcó que los mandos militares en los municipios de Hermosillo, Guaymas, Empalme y Cajeme fueron para garantizar que la fuerza pública no esté coludida con el crimen organizado que opera en la entidad.
Luego, indicó que eso no significa que los mandos de seguridad de los municipios quedan bajo responsabilidad de la Secretaría de Seguridad federal (SSPyPC), sino que todos los estados y municipios tienen sus responsabilidades en la seguridad y eso no lo va a sustituir ni la propia SSPyPC, la Guardia Nacional ni ninguna otra instancia.
“Lo que cambia es que ya no estamos echándonos la bolita unos a otros, en virtud de que el problema de seguridad pública es de naturaleza municipal, estatal o federal… En virtud de la dimensión del problema estamos juntas todas las instancias corresponsabilizadas atendiendo el problema como uno de Estado, con una visión de Estado…”
Así, para que se entienda bien, según lo dicho por Durazo, en esa visión de Estado sobre el problema de inseguridad, ningún alcalde o gobernador es desplazado ni puede evadir su responsabilidad, lo mismo que ninguno puede ser dejado solo en sus circunstancias particulares…
Es, pues, una importante precisión para quienes crean que los mandos militares les significarán una zona de confort.
***
EL MANDO ÚNICO…
Por otra parte, el secretario Alfonso Durazo mencionó que, si bien se nombraron comisarios militares en Empalme y Guaymas, ambos municipios quedaron bajo el modelo de Mando Único, por considerarse la estrategia más apropiada para esa zona.
Durazo explicó que en Sonora ha recrudecido la violencia entre organizaciones criminales por el control de rutas de drogas y migrantes, pero esperan pronto reducir este pico de violencia “en la mejor colaboración con el Gobierno del Estado”.
Por su parte, el general secretario de Marina, José Rafael Ojeda, aseguró que en Guaymas y Empalme ya inició la depuración de las policías municipales, aunque reconoció que, si bien los agentes que no pasan los exámenes de control y confianza son sacados del trabajo en las calles, ha sido complicado retirarlos definitivamente de sus cargos…
Es decir, se han topado con el mismo problema que tenían los alcaldes desde hace trienios.
***
RECORTE DE MIL MILLONES
Apenas ayer les comentamos la necesidad de que los legisladores federales hicieran equipo con el Gobierno del Estado y municipios para evitar más perjuicios por los recortes presupuestales que agobian las finanzas públicas en este año, cuando ayer mismo la gobernadora Pavlovich informó la mala noticia de que para 2020 viene otro tijeretazo de mil millones de pesos para Sonora.
Ante ello la mandataria estatal se ha impuesto como prioridad dialogar con el secretario de Hacienda, Arturo Herrera, pues dijo que le urge platicar de este tema de los recortes pero además ver cómo cerrar ya la operación de la venta de los estadios de beisbol de Hermosillo y Ciudad Obregón.
La Gobernadora reiteró que no sólo quiere que en la Federación escuchen sus argumentos, sino los de alcaldes de todos los partidos, ya que si no hay dinero directo para los ayuntamientos, como parece que no lo habrá, pues menos tendrán obras si no hay dinero para el Gobierno estatal…
Total, que el maltrato presupuestal para los estados y municipios seguirá en 2020, todo indica.
***
SÍ FUE AÑO DE HIDALGO…
Tal como le adelantamos, la sesión de ayer del Congreso para la calificación de las cuentas públicas de los municipios fue larguísima y, dicen los reporteros, tremendamente aburrida, siendo la nota principal que fueron 31 los que reprobaron para imponer un récord en el nada honroso historial de los manejos irregulares de los ayuntamientos.
Los municipios acumularon cuatro mil 152 observaciones y de esas dejaron pendientes de atender tres mil 772…
Es decir, que a los alcaldes que se fueron y a los que entraron les valieron una pura y dos con sal las observaciones del ISAF.
Ante tantas observaciones, que significan montos por aclarar que rebasan los 250 millones de pesos, no hay duda que 2018 fue para muchos alcaldes “el año de Hidalgo”…
Pero, ¿saben cuál fue el “costo” por tantas observaciones o irregularidades?
Solamente se han aplicado 189 multas, 32 amonestaciones y dos suspensiones…
Es decir, poco o nada frente a lo perdido.
***
LO BUENO, LO MALO Y LO FEO…
Dentro de lo poco bueno que se puede concluir de las calificaciones de las cuentas públicas municipales 2018, está que por segundo año consecutivo el Municipio de Huépac fue el mejor evaluado, lo cual debiera reconocerse al exalcalde Francisco Javier Padilla.
Lo malo fue en los municipios más grandes, que cuentan con mucho más equipo humano y técnico para llevar el control de los procesos y el gasto, pues Guaymas fue reprobado y el resto (Hermosillo, Cajeme, Nogales, San Luis y Navojoa) todos pasaron pero apenas “de panzazo”.
Y lo peor es que Empalme repite precisamente como la peor administración municipal de los últimos años (y sin mayores consecuencias para sus exalcaldes), lo mismo que en Cananea donde, según el ISAF, dieron muestra de cómo puede hacerse el mal uso de los recursos del Fondo Minero.
