Crece Internet y su vulnerabilidad

Crece Internet y su vulnerabilidad, escribe Marco Paz Pellat en #ElPoderDeLasIdeas

La pandemia del Covid-19 aceleró la adopción de la tecnología ante la necesidad de trabajar y estudiar en casa para no parar la actividad humana. No solamente aumentó el uso de Internet, sino que también crecieron los usuarios de la red de redes.

De acuerdo con al informe anual Digital 2022, de la agencia We Are Social y de la empresa Hootsuite, los usuarios de Internet se incrementaron en 4% con relación a 2021, 192 millones de personas, para llegar a 4,950 millones de internautas en el mundo. Lo mismo sucedió en las redes sociales. Este año tenemos 4,620 millones de usuarios, un crecimiento de 10%, que significaron 424 millones de nuevos participantes con relación al año anterior (https://bit.ly/3rffNie).

Este mismo informe consigna que se aumentó también el tiempo de uso del Internet y las redes sociales para llegar a promedios diarios de 7 horas y de 2 horas y 27 minutos, respectivamente.

Con el crecimiento del número y el tiempo de uso y dependencia de la tecnología en tiempos de pandemia, también desafortunadamente ha crecido la vulnerabilidad de la seguridad y el resguardo de la información que se comparte por la red, por el uso de terceros como los casos del los servicios en la nube, la inteligencia artificial, el Internet de las Cosas, el blockchain, la tecnología de comunicación 5G, las APIs y diferentes mecanismos de intermediación que utilizamos.

Por ello, el Informe de Riesgos Globales 2022 del Foro Económico Mundial (https://bit.ly/3rqlbiV) señala crecientes vulnerabilidades del mundo digital que debemos cuidar:

-Otros puntos débiles. La digitalización de las cadenas de suministro físicas crea nuevas vulnerabilidades porque esas cadenas de suministro dependen de la tecnología de proveedores y otros terceros, que también están expuestos a similares, potencialmente contagiosas, amenazas.

-La actividad maliciosa está proliferando. El malware aumentó 358% en 2020, mientras que el ransomware aumentó 435%. El ransomware como servicio permite incluso a criminales no técnicos ejecutar ataques, una tendencia que podría intensificarse con la llegada de malware impulsado por inteligencia artificial (IA). De hecho, los grupos de ciberdelincuentes con ánimo de lucro están listos para proporcionar acceso a sofisticadas herramientas de ciberintrusión para facilitarles ataques.

-Riesgos cuánticos. Hay preocupaciones de que la computación cuántica podría ser lo suficientemente potente como para romper las claves de cifrado, lo que plantea un riesgo significativo para la seguridad debido a la sensibilidad y criticidad de la situación financiera, datos personales y otros datos protegidos.

-Más puertas de entrada. El surgimiento del metaverso también podría expandir la superficie de ataque para actores maliciosos, creando más puntos de entradas por malware y violaciones de datos. Como el valor del comercio digital en el metaverso crece en alcance y escala—según algunas estimaciones, se proyecta que terminará US$800 mil millones para 2024— este tipo de los ataques crecerá en frecuencia y agresión.

Ante esta situación, es de vital importancia el impulso de esfuerzos conjuntos de autoridades, organizaciones profesionales y empresas especializadas para desarrollar nuevas medidas, normas, protocolos y mecanismos para mejorar la ciberseguridad.

El Informe del Foro Económico Mundial sugiere enfocar los esfuerzos en las tecnologías emergentes como el blockchain, la computación cuántica, la inteligencia artificial y los diferentes mecanismos de intercambio digital.

Si bien la tecnología nos salvó en uno de los momentos más críticos de la humanidad, también es cierto que si no resolvemos los riesgos de ciberseguridad nos estaríamos acercando a riegos incalculables por sus consecuencias. El futuro parece que pende de dar una respuesta efectiva en materia de ciberseguridad.