Uno de pirata y ‘periodismo’ patito

Uno de pirata y ‘periodismo’ patito, escribe Carlos Marín en #ElAsaltoALaRazón

Paul Ernesto Velázquez Benítez es uno de los blogueros consentidos en las conferencias del presidente López Obrador. Forma parte de la porra de bribones que cada mañana gana los mejores asientos a los genuinos reporteros para cumplir con descaro la misión de reventar los intercambios de preguntas y respuestas en asuntos que suponen incomodan al prominente anfitrión.

Hace casi tres meses en Sinaloa le dieron un balazo en el cuello y afirma que el atentado fue ordenado por el alcalde de Los Mochis. Desde entonces, aunque no siempre, anda con un parche sobre el cristal derecho de sus anteojos. Lo apodan El Pirata.

Isabel González, reportera del Grupo Imagen (20 años de carrera), tuvo con él antier un altercado y se lo expuso este jueves a López Obrador:

-Ayer fue un día negro para las mujeres que cubrimos Presidencia de la República. De manera muy respetuosa, se lo digo, fui víctima de un acto de odio, de incitación a la violencia en mi agravio, afuera y dentro de Palacio Nacional por parte de un individuo que está a mi lado izquierdo y trae un parche (...), diciendo que ojalá me balearan como a él, sólo por decirle que su parche lo hace ver como un pirata falso porque a la vista de los auténticos periodistas que cubrimos las actividades presidenciales, cuando llega a Moneda (la calle), llega sin parche y admite ante varios colegas que en su ojo no tiene nada, pero incita (contra ella) un crimen de odio. Me pongo en sus manos y de las autoridades. Usted ha dicho no a la violencia. El video ahí está, es irrefutable. Y también hace semana y media lo dijo al interior de Palacio Nacional, solo que esa vez no grabaron video. Pido la protección de la Secretaría de Gobernación, porque fue el mismo sujeto que llamó a todas las compañeras ‘prostitutas de la información’ hace ya varios meses…”.

¡Chíngale!

AMLO respondió: “Les hago una propuesta –lo que quiero es que se busque una reconciliación, se puede, se puede. ¿Por qué no perdonarnos?

Ilustró la reportera: “Es apología del delito, Presidente, y eso no se perdona ni se reconcilia”.

López Obrador insistió: “Entiendo que afecta en lo personal o se sienten afectadas las partes. Si no hay una reconciliación, entonces yo les diría acudan a las instancias judiciales”.

-Ministeriales primero –corrigió la periodista.

-Sí, ministeriales, judiciales. Y están en libertad. Nada más yo les pediría con todo respeto, con todo cariño, que aquí también por respeto a la gente pero sobre todo al pueblo, que no nos peleemos aquí de esa forma (...). Nosotros no vamos a poder limitar la libertad de nadie.

-¿Pero es libertad?

-Miren: aquí sí les aplico la de los liberales: la prensa se regula con la prensa.

Bochornoso problemón.

Sobre todo cuando, como hizo ver la reportera, lo que El Pirata representa no es “prensa” (basta ver en YouTube su viperino, patético y pirata “periodismo de investigación…”) ni su acción escapa (Título Octavo, Capítulo VII, Artículo 208) al Código Penal Federal…