“Este 2021 el marketing es emocional”

El autor es Director General en Agencia RRG Marketing y miembro activo de ASPAC.

Este 2021 se ha venido presentando como un año coyuntural para la industria del marketing, esto debido a que después de un 2020 en el que nos enfrentamos una pandemia (bastante mencionada) y a una parálisis prácticamente total de la economía mundial, muchas marcas perdieron el rumbo, perdieron sus clientes y lo principal perdieron esa conexión que las unía a sus públicos.

Derivado de esto, los que nos dedicamos al marketing hemos  tomado un rol protagónico en encontrar esa membrana que volverá a conectar a las marcas con sus audiencias.

Es una realidad que vivimos en un mundo tan globalizado que las marcas luchan arduamente para resaltar entre sus competidores buscando la mejor estrategia y el mejor canal de comunicación para diferenciarse.

Ante este escenario es importante que nos demos cuenta que todos los seres humanos quedamos muy sensibles ante cualquier estímulo que nos altere las emociones de manera positiva al

igual que negativa.

Para encontrar esas membranas que conectarán a las marcas con sus públicos debemos voltear a ver al marketing emocional como una herramienta fundamental para lograrlo, ya que es la parte de la mercadotecnia que plantea estrategias que intentan lograr un vínculo afectivo con un tipo de mensaje que cale en su subconsciente despertando sus sentimientos, apelando así al lado más humano.

Un ejemplo de ello es la Ruta de Marca, si tú en la mañana que te levantas trazas una ruta y en ella relacionas todas las marcas con las que convives en un fragmento de tu día, digamos  que  hasta que llegas al trabajo, te darás cuenta que hay muchas marcas de las cuales te vas a acordar inmediatamente por su nombre y apellido por que estás conectado emocionalmente con ellas, otras que las usas porque te son funcionales y te da igual una u otra, por ejemplo tu coche o tu teléfono celular, los cuales puede ser que los compraste por el costo de oportunidad del momento.

Y habrá otras que en realidad no te acuerdes ya que son tan básicas que te da igual tenerlas o no, o que simplemente las compraste por instinto, un ejemplo de ello son las ofertas o promociones a las que estamos expuestos constantemente.

Las marcas con las que conectas emocionalmente y que las tienes bien posicionadas en el cerebro están haciendo un buen trabajo de marketing emocional para que esa membrana se mantenga conectada a su público.

Otro ejercicio que sirve de comprobación es: recuerda tu último cumpleaños, te puedo apostar que recuerdas qué comiste, con quién comiste, dónde comiste, inclusive hasta cómo te vestiste, esto es por que hay un ANCLAJE EMOCIONAL de por medio y también te puedo apostar que no recordarás lo mismo de un día anterior o un día después.

Y si también buscas memorizar un dato numérico ánclalo a una emoción y jamás lo olvidarás. Así de fuerte son las emociones, “la decisión de compra depende de las emociones mas que de la información”.

El autor es Director General en Agencia RRG Marketing y miembro activo de ASPAC.