El México feminicida

La autora es Directorade Grameen de la Frontera y profesora de la Escuela de Negocios del Tecnológico de Monterrey

En México, la violencia feminicida es un concepto que se incorporó a la Ley General de Acceso a las Mujeres a una Vida Libre de Violencia, que la define como: “la forma extrema de violencia de género contra las mujeres, producto de la violación de sus derechos humanos en los ámbitos público y privado, conformada por el conjunto de conductas misóginas que pueden conllevar impunidad social y del Estado, y puede culminar en homicidio y otras formas de muerte violenta de mujeres”.

La Organización de las Naciones Unidas publicó en diciembre de 2020 el documento “La violencia feminicida en México, aproximaciones y tendencias” como una estrategia para difundir la situación que guardan los delitos violentos contra las mujeres y su relación con la violencia feminicida en el país donde se dice que “a las mujeres no se les debe tocar ni con el pétalo de una rosa”.

El número de defunciones femeninas con presunción de homicidio y mujeres víctimas de asesinato ha mostrado dolorosamente una tendencia al alza, pasando de un promedio de 6.4 mujeres por

día en 2015 a 10.3 en 2019. Sólo en 2019 fueron 971 mujeres las que fallecieron con presunción de homicidio y 2,862 fueron víctimas de homicidio doloso.

Los asesinatos de mujeres suelen cometerse con crueldad, utilizando medios que pueden prolongar el dolor, producir sufrimiento y lesiones vejatorias y degradantes mediante el sometimiento y el uso de la fuerza.

En 2019, 29.3% de las mujeres fueron estranguladas, ahorcadas o sofocadas, ahogadas, quemadas o golpeadas con algún objeto, o agredidas con un arma punzocortante. Es importante señalar que

la tendencia de asesinatos en vivienda ha oscilado con una ligera tendencia a la baja, pero en el caso de los feminicidios en la vía pública se ha incrementado, afectando principalmente a mujeres jóvenes de 20 a 24 años, convirtiendo las calles y sitios públicos en lugares peligrosos para este sector de la población.

Paradójicamente, las mujeres de 20 a 24 años representan uno de los sectores que más requiere salir, pues no solamente están dentro de la población económicamente activa, sino que representan también un importante número en la población estudiantil. Las mujeres de este rango deben salir temprano a las calles para ir al trabajo o la escuela; deben tomar transporte público y visitar sitios donde pueden encontrarse agresores potenciales.

Sancionar el feminicidio es una de las tareas pendientes de este país, además de que es urgente la armonización de dichas sanciones pues el feminicidio es castigado en 6 estados con una pena de 20 años; en 15 estados con 50 años, y en 6 entidades con la pena máxima que va de los 45 a los 70 años. Lo anterior demuestra que el valor a la vida de las mujeres está sujeto, increíblemente, a la zona geográfica y la cultura de la legalidad que en ésta prevalece.

Hemos iniciado marzo, periodo que muchas instituciones dedican a hablar de los retos que enfrentan las mujeres y niñas en México y el mundo, en el marco del Día Internacional de la Mujer, que se conmemora el 8 de marzo. Es importante hablar de la lucha feminista, de lo desafiante que resulta la construcción de igualdad de género, de los pendientes que existen para reducir las brechas laborales y de lo relevante que es lograr inclusión financiera para las mujeres; sin embargo, lo más importante es hablar del derecho a la vida, algo fundamental que en este país aún no ha quedado

claro. ¡Vivas nos queremos!

La autora es Directorade Grameen de la Frontera y profesora de la Escuela de Negocios del Tecnológico de Monterrey,

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