Terminando 2020

El autor es Presidente Nacional del Colegio Mexicano de Profesionales en Gestión de Riesgos y Protección Civil, A.C

Amiga y amigo... El pasado mes de enero todos, sin excepción, iniciábamos con entusiasmo un nuevo calendario, y sin embargo, hoy estamos terminando uno de los años más raros y difíciles que como humanidad hemos enfrentado en los últimos 100 todas las generaciones que coincidimos en esta época.

Muchos de nosotros hemos padecido directa o indirectamente la enfermedad y las consecuencias de esta pandemia, es un fin de año triste porque entre nosotros hay familias incompletas.

Durante los nueve meses que la hemos padecido en México, se han perdido amadas personas entre familiares y amistades cercanas. Esta Navidad algunas mesas tendrán sillas vacías y a pesar de ello, existen personas que dudan de que el virus sea verdad, ¡que triste! Desafortunadamente, para el año 2021 los temas de salud y economía no son alentadores en el corto plazo, será un año de mucha incertidumbre y grandes desafíos, lo que nos retará a echar mano de los valiosos recursos que guardamos en nuestra mente y nuestro corazón.

Hace algunos años, una famosa marca de un caminante citaba la frase aparentemente anónima, pero totalmente acorde a este tiempo: “la adversidad enfrenta al hombre consigo mismo”, es momento de hacerlo.

Estos días de descanso que tendremos, servirán para tomar un respiro, un descanso vital para pensar asertiva y productivamente, servirán también para voltear hacia atrás y reflexionar con serenidad lo que hemos vivido, dónde estamos y hacia dónde queremos ir, de ser necesario reenfocar nuestro propósito de vida.

Lo más importante es que servirán para reflexionar y renovar nuestra fe y esperanza, que a pesar de lo catastrófico, gracias a Dios al menos hasta hoy seguimos presentes, y cuidándonos podremos seguir planeando nuestro futuro.

En este ánimo de reflexión, debemos evitar el  autoengaño, recordemos que para resolver un problema es necesario primero reconocerlo. Estamos en crisis y para salir avante debemos trabajar en nuestra fortaleza con perseverancia, determinando lo que debemos hacer según nuestros valores y creencias, resistiendo, aunque en ocasiones se presente el sufrimiento, con la paciencia y confianza de que los malos tiempos pronto pasarán, trabajando sin pausa y sin prisa pero sin descanso, con creatividad e ingenio innovador, con compromiso, participación y esfuerzo.

Por último, te deseo muchas felicidades y que en la medida de lo posible, cuidando a la familia, puedas celebrar estas fechas lo más cerca de tus seres queridos.

Cuídate y cuídalos porque ¿para qué pintar de negro esta Navidad, si blanca se ve mejor? Nos vemos el próximo año, aquí mismo en este espacio de eComunidad del Periódico EXPRESO, te envío fraternalmente un gran abrazo con sana distancia.